Desde hace casi dos semanas, Euskadi y el resto de sus provincias viven en la denominada 'nueva normalidad' tras la crisis sanitaria provocada por el coronavirus. Un periodo en el que algunos ciudadanos parecen haberse olvidado de la gravedad de la situación produciéndose imágenes lamentables de reuniones en masa en plena calle. Desde el Departamento de Salud se ha advertido que si continúan sucediendo este tipo de hechos, las medidas y restricciones aumentarán para evitar nuevos contagios.
Las aglomeraciones que se produjeron hace unos días en Irun y en Vitoria, con motivo de la celebración de las fiestas de San Marcial y del título de Liga del Baskonia, preocupan "mucho" en Osakidetza, tal y como reconoció la consejera de Salud del Gobierno Vasco, Nekane Murga, en su última comparecencia.
Murga ha advertido que en este tipo de reuniones hay "un mayor riesgo" que en un encuentro familiar. La causa es que si se confirmara un contagio en alguna de estas aglomeraciones "la trazabilidad y la identificación serían más complicadas, y la situación sería de mayor riesgo", mientras que si el contagio se produce en un entorno familiar o social próximo, "una persona puede decir con qué personas ha tenido contacto estrecho".
La consejera de Salud de Euskadi ha reconocido que si este tipo de reuniones continúan celebrándose, "las restricciones y medidas de prevención irán aumentando" de forma progresiva.
"Tenemos diferentes posibilidades de actuación como barreras mecánicas, mayor presencia (de personal), una mayor campaña informativa o posibles intervenciones en transporte público y horarios. Es algo que debemos ir valorando en cada situación concreta", ha detallado Nekane Murga en rueda de prensa.
A pesar de la situación y después de los últimos episodios, la consejera pide a la ciudadanía que disfrute del verano en el campo, en la playa, que use el transporte público, pero que lo haga con "prudencia y responsabilidad".