El Ayuntamiento de Bilbao ha presentado su estrategia para el futuro de La Casilla, que abarca tanto la puesta en marcha de nuevas infraestructuras deportiva y multiusos como el impulso urbano, social y económico del entorno en el que se ubica. Así lo ha explicado el Alcalde Juan Mari Aburto, para el que la estrategia del Ayuntamiento –ha desgranado- “persigue un triple objetivo”.
“Crear un polideportivo compacto moderno en el centro de la ciudad, que sustituya al actual y recoja, mejore y amplíe la oferta deportiva existente”. Y por otro lado, “habilitar un nuevo espacio multiusos cubierto, que pueda albergar eventos de ciudad –deportivos, asociativos o de ocio–”.
Por último, el tercer objetivo planteado por el Consistorio tiene una visión más amplia, de ciudad, ya que “nos permitirá trabajar en la cohesión y revitalización el entorno de la nueva infraestructura”. Cuestión que se abordará posibilitando la creación de un aparcamiento subterráneo de varias plantas.
El actual equipamiento de La Casilla fue inaugurado al final de la década de los 60 y ha ido adaptándose físicamente, dentro de su envolvente, a los diferentes cambios en la red de equipamientos deportivos de Bilbao, intentando dar respuesta a las necesidades principalmente del entorno de Errekalde pero también de otros barrios e incluso del resto de la ciudad.
Durante años, ha sido un equipamiento de referencia, por su centralidad, cercanía al transporte público, y demanda de actividad.
Consciente de ello, el Ayuntamiento de Bilbao asume que las nuevas posibilidades que se exploren en La Casilla y su entorno, tanto constructivas como funcionales, han de ser exigentes y deben contribuir a potenciar una unión efectiva entre los barrios de Errekalde, Ametzola e Indautxu.
Un espacio de agua que deberá dimensionarse de acuerdo a la demanda objetiva y a la red de equipamientos próximos de ciudad.
Un pabellón con dos canchas longitudinalmente localizadas que permitan la ubicación de tres canchas transversales en cada una de ellas, generando de esta forma seis espacios de utilización simultánea.
Al menos una sala polivalente de dimensiones suficientes que permita actividades dirigidas de, al menos, un cupo de 50 personas.
Al menos una sala polivalente destinada a actividades de salud y bienestar, pilates, yoga.... dada la creciente demanda y gran aceptación de estas disciplinas entre la población usuaria de La Casilla.
Una sala fitness de parecidas características a la actual, pero ampliada y optimizando sus espacios.
Con la posibilidad de incluir otros usos, como sauna, spa, hidroterapia.
En definitiva, se plantea un polideportivo compacto de última generación que se especialice en el ocio familiar saludable y ofrezca una amplia oferta de actividades, monitorizadas o no, para compartir en familia.
Un polideportivo que pasará a integrarse en la red de Bilbao Kirolak y, en consecuencia, tendrá tarifas idénticas y las mismas condiciones de acceso que el resto de equipamientos municipales.
El actual equipamiento de La Casilla está muy demandado para la celebración de eventos lúdicos y deportivos. Usos que ahora se ven limitados por cuestiones, por ejemplo, de seguridad o aforo. Sin embargo, la demanda es real y el nuevo proyecto permitiría avanzar en este sentido, a resultas del Diálogo Competitivo
Así, eventos deportivos, lúdicos –como los tradicionales bailables, por ejemplo– así como otros nuevos de tipo cultural, musical o comercial, o incluso encuentros profesionales, podrían tener cabida en el nuevo espacio proyectado. Y cuyas características quedarán definidas a resultas de las conclusiones que se extraigan tras el proceso de Diálogo Competitivo.