A veces aquello que más miedo da no está tras la puerta de un armario o bajo la cama, sino en nuestros propios sueños. Esa es la premisa que siga Before I wake, una de las películas con más retrasos en su estreno que jamás haya visto. Desde que en 2013 comenzara a rodarse, y tras numerosos atrasos por culpa de los problemas financieros de la productora, en el mes de septiembre por fin verá la luz.
Before I wake cuenta la historia de un joven matrimonio, Jessie y Mark, que adaptan a un niño de 8 años llamado Cody tras haber perdido a su propio hijo con más o menos esa misma edad. Cody tiene pánico a quedarse dormido, como posiblemente muchos niños, por lo que sus nuevos padres intentarán quitarle el miedo haciéndole saber que no pasa nada por quedarse dormido.
Pronto descubrirán que más que miedo a quedarse dormido, tiene miedo a sus propios sueños pues éstos se manifiestan en la realidad, atacando a todo aquel que se encuentre en la casa despierto.