Abril de 2016. David Benioff & D.B. Weiss conceden una entrevista a Variety y dan la explosiva noticia: a Juego de tronos (2011-2019) le quedan 13 episodios. Se confirma después que efectivamente la 7ª y 8ª temporada de la serie serán las últimas, con 7 y 6 entregas, respectivamente. En ese momento, con la excelente sexta temporada en emisión, pocos cuestionaron la decisión más allá de lamentar que no fueran las habituales tandas de 10 entregas. Pero no desde el punto de vista de la calidad, ya que el dúo de creadores no había decepcionado al gran público hace tres años.
Mayo de 2019. 12 de esos 13 episodios de colofón para Juego de tronos se han emitido, y ahora es la minoría la que defiende la decisión de los guionistas, ya que vistos los capítulos, e independientemente de la conclusión que ofrezcan, el consenso general es que no era suficiente tiempo. Incluso con múltiples episodios de hora y cuarto de duración, la sensación de aturullamiento, prisas y acciones forzadas está acompañando a las entregas, parcialmente en la temporada 7 y bastante en la 8, hasta el punto de que uno no puede evitar cuestionarse si los firmantes no habrán caído en su propia trampa.
¿Es posible que mapearan los 13 episodios argumentalmente pero que al escribirlos se vieran obligados a encadenar cosas sin descanso? Porque es la sensación que transmiten las entregas, cuyas sinopsis son sencillas (la batalla de Invernalia, Daenerys ataca Altojardín, Meñique trata de influir a Sansa contra Arya) pero cuyo desarrollo parece espídico, asfixiando a veces la humanidad de los personajes en favor de las tramas y diálogos importantes.
No pasa en cada entrega, pero se ha dado lo suficiente para notarlo y que no se pueda decir que los que criticamos este aspecto estamos siendo quisquillosos o buscando problemas donde no los hay. Porque el fin de Juego de tronos tiene problemas, por muy espectacular que sea. Así que, ya sea como fan que quiere más o como analista crítico, se puede coincidir en que 13 episodios no eran suficientes para lo que se está contando.