No necesitó un partido redondo. La segunda parte firmada por el Real Betis ante el Rayo Vallecano le valió para vencer de nuevo y que los aficionados verdiblancos esbozaran una sonrisa en una lluviosa noche de septiembre. Un primer tiempo atascado dio paso a otro Betis, más suelto y decidido que acabó dejando los tres puntos en el Benito Villamarín.
Fue el viejo Betis de temporadas atrás o de los días ante el Villarreal y e Atlético, el del nivel competitivo y solvente que garantizó éxitos con clasificaciones europeas. El de las dos caras tan interesantes en el mundo del fútbol, capaz de sobrevivir a fases de menos brillantez, como sucedió en la primera parte, y de generar juego desde el protagonismo con la pelota y mayor verticalidad, en la segunda.
Ese doble matiz, que no siempre cumple como ocurrió en Bilbao, tiene elementos nuevos. Y es que la plantilla del Betis ha vivido este verano una profunda renovación. No hay más citar algunos de los protagonistas del triunfo bético ante el Rayo. Marc Roca, un nuevo partido descomunal, Isco Alarcón, que confirmó la regularidad de la magia, o hasta elementos de la plantilla del pasado curso que parecen otros. Willian José es su exponente máximo, otro ejemplo podría considerarse Abner.
El caso es que el Betis 4.0 de Manuel Pellegrini maneja registros comunes de años atrás. Esa competitividad que, eso sí, necesita un punto más para intentar derribar el listón de las tres clasificaciones para la Europa League y mirar a la Champions. El patrón, de juego y también de liderazgo, responde al apodo del Ingeniero.
Sin embargo, fueron hasta ocho fichajes -nueve pero Collado se marchó cedido- que le dan un aire diferente necesario en una plantilla que había dado síntomas en la última parte del curso pasado de agotamiento. Algunas de esas incorporaciones han entrado con impacto súbito (Isco, Marc Roca o hasta Ayoze en su segunda etapa), otros como Abde ni siquiera han tenido tiempo de debutar aún.
El trabajo veraniego del consejo y Ramón Planes en la construcción de la plantilla han generado ilusión, más allá de matices en algunos puestos. La receta parece clara con Manuel Pellegrini. Pasa por ese doble matiz de competitividad para sobreponerse a las fases menos brillantes de juego y protagonismo con la pelota alrededor del talento. El nuevo viejo Betis.
Suscribo cada una de tus palabras. Este betis se ha renovado pero mantiene la esencia de los últimos años y nos ilusiona cada vez más con poder dar otro pasito más hacia arriba. Son cuatro partidos y esto es muy largo, pero por el momento tenemos 7 puntos que no nos quita nadie y unas sensaciones difícilmente mejorables.
Totalmente de acuerdo contigo, Javi. Este equipo este año nos va a dar muchas alegrías. Me alegro mucho del resurgir de isco. Un saludo para ti, Javi