Los deportes tradicionales vascos están basados en tareas habituales, ancestrales de los pueblos de Euskadi. Así encontramos la aizkora proba, el hacer leña; el barrenak, de origen minero, de hacer agujeros en la piedra con una barra de metal; o la sokatira, con dos equipos tirando de una misma cuerda. Son sólo algunos ejemplos tradicionales, arraigados en la cultura vasca.
Desde la pueblada futbolera de Iñaki Williams en San Mamés, de arrastrar unos metros la burda marca de un Gerard Piqué desbordado, buscando llevarse el balón y llegar a meta por encima de todo y de todos, tenemos un nuevo deporte vasco; podríamos llamarlo “el sentir Athletic”.
Al partido de cuartos de final por la Copa del Rey 2020, los equipos del Athletic Club y del FC Barcelona llegaban con sus limitaciones y sus motivaciones, con sus palmareses de ser los equipos que más títulos ganaron en esta competición; 30 y 24 veces respectivamente.
Con el Barça acaso en el inicio de un cambio de ciclo (institucional, deportivo), el Athletic llegaba con su pasión copera, los aldeanos, el otrora autobús de Clemente. Parecía una de David y Goliat, pero no resultó así: hubo bastante equilibrio de fuerzas.
El marcador se mantuvo en cero los 90 minutos reglamentarios, con un dominio del Athletic en la primera parte y del Barça en la segunda. Y en la prórroga de 4 minutos, faltando apenas el último en juego, llegó el centro preciso y certero de Ibai Gómez y el cabezazo de Iñaki Williams que ganó a la marca de Sergi Busquets y mandó al fondo de la portería de Ter Stegen.
Se notaban las limitaciones en el Athletic: el cansancio físico, la falta de un mediocampo creativo capaz de generar juego, la merma en la presión en todas las líneas. Sin embargo, “el sentir Athletic” iba a más: en el campo y en la grada de San Mamés. Acaso ese sentimiento individual y colectivo marcó la gran diferencia.
¿Preparamos la gabarra? A su debido tiempo. Quedan los 4 finalistas de este nuevo formato de Copa del Rey: el Athletic, la Real Sociedad, el Granada y el Mirandés. Todo se andará. Y acaso, al final, tengamos nuestra singladura más festiva. ¡Aúpa Athletic!
Alejandra Herranz, periodista y blogger
@aleherranz