Estoy viviendo unos días muy especiales para mí. Son tantos los buenos recuerdos que me ha traído este nuevo emparejamiento con el Manchester United... Aunque bueno también alguno malo, el caer eliminados y también no haber podido jugar el partido de Maine Road hace ahora 55 años. Creo que ese es el peor disgusto que me llevé en toda mi carrera. Me lesioné el domingo y aunque Daucik me llevó tuve que vivir el 3-0 en el banquillo. Fue horroroso como lo pasé.
Pero sin duda está compensado por todo lo que vivimos en San Mamés con el recordado 5-3 en plena nevada. Aquel día hice dos goles, los dos primeros, algo un poco sorprendente porque nunca me consideré un goleador puro, para eso ya estaban los Arieta, Artetxe y demás. Pero Eneko estaba lesionado y tuve que jugar de delantero centro. Siempre digo que los goles son anecdóticos, tan solo tuve suerte. Fue un día muy bonito en el que demostramos que también eramos un gran equipo como ellos. Lástima que en la vuelta tuvimos muchos problemas de lesiones. Espero que los jugadores actuales nos puedan dar esa pequeña revancha.
Recuerdo que en su momento Matt Busby al acabar el partido de Bilbao dijo que nuestro público le había impresionado. Pues lo de ahora ha sido de lo mejor que he visto, nuestra afición es única. Fue tan precioso, portándonos todos tan bien, haciéndose fotos con la policía, cantando con educación y con alegría. Una maravilla todo.
Al equipo actual le veo bien y capacitado para ganar a cualquiera. No se puede poner ni adjetivos al partido de ida, fue fantástico, una cosa excepcional, precioso. El 2-3 está bien pero debímos ganar 1-5, tal y como jugó el Athletic le desarboló al Manchester y el resultado es injusto, tuvo que ser más amplio. Aún así lo veo bien para este jueves. Creo que el Athletic es el favorito. Hay que tener cuidado porque es un gran equipo que es líder de la liga inglesa, pero si jugamos comos sabemos les vamos a eliminar.
El club nos ha invitado al palco a ver el partido y eso es muy agradable, se agradece mucho que tenga ese detalle con nosotros. Tan solo me queda la pena de no poder ir los seis que jugamos a ver el partido de ida, pero era difícil reunirnos porque Maguregi anda mal de salud. He tenido la suerte de poder ir a Inglaterra con mi hijo y he vuelto féliz, encima vista la victoría del Athletic y a nuestros aficionados no podía pedir nada más.