Es Noticia

Todo a cien en Gelsenkirchen

Joseba Benito, Cantera Deportiva

 
Cuando Dick Fosbury pensó por primera vez que el salto de altura podía hacerse de espaldas al listón, nadie habría dado un centavo por él. Pero no sólo tuvo esta brillante idea, sino que la perfeccionó y la hizo realidad. Su valentía fue recompensada con la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de México (1968). Con el tiempo, lo que parecía una barbaridad del atleta estadounidense se ha universalizado y ya nadie se enfrenta a esta prueba sin el estilo ‘fosbury’.
 
Y es que no hay nada como reinventarse. Algo por lo que apostó el fútbol alemán para acercar a los aficionados a sus estadios, popularizando los precios de las entradas, y que tan excelentes resultados le ha dado. La pasada temporada batió el récord de asistencia a los partidos de la Bundesliga  con más de 13 millones de espectadores, garantizándose el lleno absoluto la gran mayoría de los clubes.
Entre ellos el Schalke, contra el que estos días se enfrenta nuestro Athletic, que contabiliza una media de 61.000 espectadores cada vez que juega en su moderno estadio ‘Veltins Arena’. Espectacular: esa es, sin duda, la gran diferencia entre el fútbol alemán y el español en cuanto al trato a la afición; los primeros facilitan con sus precios una asistencia plena a los estadios, los segundos ven una oportunidad de hacer caja.
Un trato desigual que con la eliminatoria de los cuartos de final de la Europa League entre rojiblancos y azules ha quedado al desnudo. El Schalke ha puesto a disposición de nuestros aficionados entradas a 25 euros, una auténtica ganga a estas alturas de competición. El Athletic, mientras, ha ofrecido a los seguidores germanos tickets cuyo precio medio ronda los 90 euros. Una desproporción exagerada que ha molestado mucho en Gelsenkirchen.
Como siempre, el balón pondrá al final a cada uno en su sitio. Y espero que Llorente sea más decisivo que Huntelaar en este atractivo enfrentamiento. Pero de momento, ellos nos ganan por goleada con su política de precios. Al menos, confío en que algún Fosbury irrumpa en el fútbol base vizcaíno, el que de verdad me importa, y proponga una nueva técnica para llevar más aficionados a los campos. Aunque tengamos que saltar de espaldas por las taquillas… 
 
 

Escribir comentario 0 comentarios
Deja una respuesta
Su comentario se ha enviado correctamente.
Su comentario no se ha podido enviar. Por favor, revise los campos.

Cancelar