Situación y Perspectiva del Athletic
El Athletic Club nos genera preocupación por su debilidad ante nuestra propia idiosincrasia pero también orgullo por su constante superación. No tenemos sedentarismo ni pretendemos que nos absorba.
En este club se transforma la dificultad en disponibilidad; es nuestro anagrama centenario. Ahora bien, la actual situación requiere un análisis exhaustivo de lo que resta de Liga y de la final de Copa. Obviamente, hay una discordancia entre las expectativas y la realidad, sobre todo en Liga.
Aquellas generan anhelo y un afán por revertir con premura el mal comienzo de liga, manifestándose desde el compromiso, desde la honradez, pero sin darnos cuenta que tanto caudal emotivo está degenerando en una gran obsesión por entrar en Europa, y que, en vez de estimular, está creando ansiedad con el consiguiente peligro de vaciarnos y languidecer en banalidades. Estamos estigmatizados por esas expectativas de inicio. Y sin embargo, la realidad nos indica que ese objetivo primario resulta complicado de alcanzar porque no hay margen de error, porque vienes de atrás con puntuación deficitaria y porque la situación actual requiere sumar de tres en tres, es decir, regularidad.
Y al fondo, la FINAL. Y ahí, existe un cortafuegos. Además y para más dificultad, el potencial del equipo tanto en calidad como en el aspecto psicológico se ha menguado sobremanera con la baja de Iker Muniain. Sin duda que es conveniente mantener el espíritu competitivo en estas últimas jornadas por tener posibilidades de conquistar la séptima plaza, pero intuyo que Ernesto Valverde va a incidir en sus planteamientos en cuestión de alinear a su once sin pensar en la final; y que conste que yo estoy desautorizado para debatir su criterio.
Pero, ¿y la perspectiva respecto a esa final sin que se estrangule la Liga? Sabido es que De Marcos no jugará, que Herrerín será de la partida, y que hay puestos “intranquilos” como el lateral zurdo ó el nueve. Sería interesente que Iraola acumulase minutos en el lateral, que Iago hiciese lo mismo, que hubiese un sustituto con confianza de Balenziaga, de Muniain, etc...
Pero todavía voy más allá, ¿y sí se produjesen más lesiones ante tanta concentración de minutos?, ¿ y si Iraola no fuese de la partida el treinta de mayo?... Toco madera. Nos queda un mes y medio de competición pero sería interesante “innovar”, y buscar motivaciones tanto para la Liga como para la Copa y con el mismo rango “registral” con respecto al objetivo. Ejemplo: alinear a Susaeta de lateral derecho; un jugador que a mi criterio tiene un buen concepto defensivo y sube con disciplina, ó acomodar a Aduriz de media punta con un nueve a su espalda.
Hay que regenerar las tímidas perspectivas actuales y las que se centrarán en la final. Somos el Athletic y las dificultades las minimizamos con actitud positiva. No nos queda otra.
Por Pablo Palacio
Entrenador del Sodupe UC, Socio del Athletic Club
Otro artículo en ElDesmarque Bizkaia de Pablo Palacio: 'Las siete diferencias del Athletic Club en un año'
@jpablopalacio