Un rayo de esperanza, Iñigo Córdoba
Un rayo de esperanza. Lezama sigue funcionando. Desde hace varias semanas los focos empiezan a apuntar sobre un extremo, y es que, con tan solo 20 años, está siendo la revelación de un Athletic Club que no levanta cabeza. Su juventud unido a su verticalidad está acaparando todas las miradas. Iñigo Córdoba, es un bilbaíno del barrio de Deusto que puede convertirse en el jugador clave del futuro del equipo rojiblanco.
Los resultados no acaban de llegar, la afición se está impacientando debido al escaso juego que ha mostrado hasta ahora el equipo, pero Lezama sigue dando jugadores. Núñez se ha asentado en eje de la zaga junto a Laporte y Córdoba ha aprovechado su oportunidad. Estos son los verdaderos títulos del Athletic, seguir compitiendo con "la cuadrilla". Córdoba se ha criado en Lezama y sus hermanos también están pegados al balón, Aitor, es capitán del Leioa y Asier, sigue formándose en la cantera rojiblanca. El bilbaino ha ido quemando etapas hasta llegar al primer equipo de la mano de Kuko Ziganda. Un extremo al que le sobran las características: profundidad, descaro, rápido… ya ha sido internacional con la selección sub´19, y ahora ha sido llamado por la sub´21 de Albert Celades, el joven no hace más que dar pasos de gigante. Se estrenó con el Athletic en San Mamés en un partido de competición Europea y cumplió, pero en Mestalla, tras la baja de Muniain, se convirtió en la referencia del equipo. Hace años que San Mamés no ve un extremo zurdo de los que se pegan a la cal. Y es que Córdoba es un extremo de los de antes, con potencia y desborde. Su buen manejo de ambas piernas le permite apurar hasta línea de fondo o encarar hacia dentro, lo cual le hace imprevisible. Además, no se esconde y tiene carácter, como pudimos apreciar en Mestalla protestando a Hernández-Hernández las reiteradas faltas que recibió. Aún no se ha estrenado como goleador, pero el encuentro ante el Sevilla no es una mala opción, estaremos atentos.
Por Cynthia Laiseka, periodista.
Bonito, Cynthia