El Athletic Club ha terminado en cinco partidos de la temporada sin hacer los tres cambios y 17 cambios han sido realizados más allá del minuto 80. El once inicial que elige un entrenador para afrontar los distintos encuentros es importante, y también lo son y en la misma medida los tres cambios o los tres hombres de refresco que pueden entrar a lo largo del partido.
Son importantes porque pueden ser un revulsivo para el encuentro, darle otra cara al equipo y solucionar aquellos problemas que se han visto durante los partidos. La función de los cambios es bien conocida por la parroquia futbolística, pero hay que saber cuándo hacerlos, qué jugadores quitar y cuáles poner, y qué número de cambios se van a realizar. Es un lance del juego que también puede hacer que el equipo dé otra imagen y que ella lleve por el camino correcto de sacar petróleo del encuentro, de sacar algo positivo. Hay que usarlo y hay que usarlo bien.
En los 23 partidos oficiales que el Athletic ha disputado desde que comenzaran las competiciones allá por finales de julio, en cinco partidos (Eibar, Valencia, Barcelona, Deportivo y Formentera) no se han hecho la totalidad de los cambios. Llama en especial la atención que José Ángel Ziganda solo hiciera un cambio el pasado domingo en Riazor. De todos los jugadores que esperaban su oportunidad en el banquillo, solo Raúl García se vistió de corto y fue para sustituir a Óscar de Marcos por lesión.
Por Iraia Hermosilla, periodista. Escribo en 'Los balones de la manada'
Contacto: iraiahermosilla@gmail.com