Es Noticia

Será por agua en el Marathon des Sables

El agua no es un problema en el Marathon des Sables

ElLas pelis hacen mucho daño. Bueno, las pelis y las series. Un buen día estaba viendo El Club de los Poetas Muertos y al siguiente quería dedicar todos mis esfuerzos a contribuir con un verso a esta vida loca, loca, loca. Otro ejemplo: un buen lunes estaba delante de la tele flipándome con Periodistas y, al siguiente, ya estaba matriculado en la Facultad de Ciencias de la Información decidido a cambiar el mundo, tipómetro en mano. Esto es así.

También es una realidad que mi imagen del desierto está muy condicionada por las películas y todo lo que en mi cabeza puede suceder en unas dunas cualesquiera ha pasado ya en el celuloide, las series o los dibujos animados. Así que sí, en muchas de mis proyecciones mentales corriendo por el desierto se cruza a la altura de mis pies una gran bola de paja que viene rodando desde lejos, hay un cráneo con cuernos a mi derecha y, un poco más allá, justo a la izquierda, irrumpe un oasis de palmeras dentro del cual hay un gran embalse de agua fresca.

El agua no es un problema en el Marathon des Sables

El agua y el desierto, ese temita. Debo avanzar que en el Marathon Des Sables que ya he corrido varias veces en mi cabeza el agua no es ningún problema. Debe ser por aquello de que es de las pocas cosas que se encarga de provisionar la organización y por las que no me tengo que preocupar tanto, pero la realidad es que en mi listado de los cien mil temas preocupantes de la preparación, éste no ocupa un lugar relevante. Dicho esto a día de hoy, aquí, delante de mi ordenador de la redacción de ElDesmarque en Madrid.

La organización del Marathon Des Sables tiene programada la cantidad de agua que recibiremos cada corredor en función de cada etapa en los respectivos puestos de control y puntos de meta. En las llamadas ‘etapas de enlace’, las que nos encaminan hacia las populares etapas reina (maratón y doble maratón), recibiremos entre 1.5L y 3L en los puestos de control 1, 2 y 3 si lo hubiera, sumados a los 6-7.5L que nos entregarán en el puesto de llegada.

La mochila es la vida en el Marathon des Sables

Litros y litros...

Los días clave el suministro se incrementa. Para el maratón hay 15 litros programados para cada corredor (3L en cada puesto de control y 6L en la llegada), mientras que para la ‘etapa non-stop’ (el doble maratón, vaya) se repartirán 25,5L en total a lo largo de los dos días que concede la organización para completarla.

Aparentemente son cantidades más que suficientes para sobrevivir pero las dudas siempre están. ¿Nos dará para alcanzar el siguiente puesto de control o el calor será tan asfixiante que puede darse el caso de escasez entre un punto de recarga y otro? ¿Se me calentará demasiado? ¿Y si necesito algo de agua para limpiarme? ¿Será suficiente para ‘cocinar’ los liofilizados? ¡¡¡Aaaaaaaaaaaarg!!! Bah, de momento prefiero pensar que en las películas siempre gana el bueno. O, al menos, siempre sobrevive.

Escribir comentario 0 comentarios
Deja una respuesta
Su comentario se ha enviado correctamente.
Su comentario no se ha podido enviar. Por favor, revise los campos.

Cancelar