Castro y Cruz, culpables de NO fichar

El Sevilla Fútbol Club, ¿debería llamarlo Sevilla FC Bank por lo mucho que ahorra?, ha dejado pasar en enero la oportunidad de mejorar y competir de tú a tú con el Valencia. Los de Mestalla se han reforzado, como el Villarreal, el Madrid y el Atlético, pero el Sevilla no. No ha fichado y ahora va a tener muy difícil jugar la Liga de Campeones. En la portería, el titular se lesiona leyendo ElDesmarque, el fichaje del suplente fue una broma pesada y el único serio es un chaval en el que hasta hace muy poco no creían demasiado. En defensa, un juvenil lo juega casi todo, los laterales diestros no dan una y por la izquierda a Navarro ya se le ven las vergüenzas. Más arriba, Denis, Gameiro y Deulofeu se han bajado del carro y sólo la vuelta de Reyes ilusiona, porque más allá de lo que digan sus detractores (no creo que les guste el fútbol), sigue y seguirá siendo durante algún tiempo el futbolista con más criterio del equipo. 
El Sevilla tiene un buen once, pero no tiene amplitud de miras. Y no las tiene porque los que mandan están más preocupados de no gastar que de mejorar, prefieren vender para ahorrar antes que fichar para crecer. Del Nido ha dejado muchas enseñanzas en el club, pero la ambición se está perdiendo. El buen proyecto necesitaba mejoras para ser rematado, Emery las pidió y Monchi las buscó, pero la decisión final fue la de no arriesgar, la de no gastar, la de no invertir. La Copa ya se ha esfumado y, aunque espero que no, la Liga Europa puede ser lo siguiente. Ahorrar un poquito puede costar muy caro.