La eterna Ruth Beitia dejó en Madrid la enésima nueva muestra de su excelencia con un salto de 1,98 metros que, a un mes de cumplir 37 años, le encaramó al primer puesto del ránking mundial del año, un bello adorno para su título nacional número 15 en pista cubierta.
La cántabra, considerada la mejor atleta española de todos los tiempos, constituyó una presencia de lujo en el centro municipal Gallur, en la segunda jornada de los campeonatos de España bajo techo, que devolvió a Manuel Olmedo el título de 1.500, dos años después.
En 2002 Ruth Beitia logró en Sevilla su primer título bajo techo, quebrando la racha ganadora de su amiga pamplonesa Marta Mendía, y desde entonces no se ha concedido un respiro: quince títulos consecutivos, aparte de los once que tiene al aire libre.
Ya era la campeona de campeonas, ahora se queda a un solo título del récord absoluto del leonés Manuel Martínez, en la actualidad responsable de lanzamientos en el Comité Técnico federativo.
Beitia llegaba a Madrid con la cuarta mejor marca mundial del año (1,95), 11 centímetros por delante de la primera de sus rivales presentes en el campeonato, Cristina Ferrando, puesto que Claudia García Jou (1,88) se ha quedado en los Estados Unidos.
Después de una hora de concurso, Ruth atacó por primera vez el listón (1,83), lo salvó sin problemas y renunció a 1,87, altura que superaron primero Cristina Ferrando y luego Raquel Álvarez, que después hizo récord personal con 1,90. Beitia replicó sin problemas, conservando el primer puesto. Por primera vez en nueve años había dos españolas por encima de 1,90.
Ruth no solo pudo con 1,93 sino también con 1,96 y luego, a la tercera, con 1,98. Sólo la lituana Airine Palsyte y la polaca Kamila Licwinko habían saltado más que ella -un centímetro- esta temporada. Ahora las ha adelantado para ponerse líder de la lista mundial.
En 1.500, la ausencia por lesión de Adel Mechaal, autor de un histórico doblete 1.500-3.000 el año pasado, dejaba solo a Olmedo en el papel de favorito, después de su récord de España de 1.000 (2:18.24) y su marca en el "milqui" (3:38.25), pero no le faltaban rivales temibles, como Marc Alcalá -segundo del ránking con 3:39.33- o David Bustos, que buscaba la mínima mundialista (3:39.50).
Alcalá y Bustos tomaron posiciones delanteras, con Olmedo a sus espaldas. La carrera discurría sin novedad hasta que David Lorenzo cambió bruscamente a 300 del final. Olmedo oyó la campana en quinta posición, pero fue adelantando hasta vencer, brazos en alto, con 4:02.79, seguido de Alcalá, Lorenzo y Bustos.
Olmedo aún no ha decidido si acudirá a los Mundiales de Portland. Asegura que necesita al menos cuatro días para adaptarse al horario.
En el 1.500 femenino, la defensora del título, Solange Pereira salió de su encierro por la calle tres, a dos vueltas del final, y se puso en cabeza con carácter definitivo pese al tenaz acoso de Montse Mas. La atleta de origen portugués venció con 4:36.29 y un margen de 8 centésimas con respecto a la azulgrana.
A Kevin López le había salido un adversario de cuidado en el 800, el salmantino Álvaro de Arriba, que el 13 de febrero irrumpió con una marca de 1:46.63, pero el sevillano, cuatro décimas más rápido que él este año, no dejó escapar su quinto título consecutivo.
López tomó la cabeza desde el disparo. Pasó el 400 en 55.33, con Álvaro a rebufo, y apretó a fondo en el último giro ara ganar con 1:49.20. Por detrás, De Arriba tuvo que apretar para recuperar el segundo puesto que le había arrebatado Daniel Andújar.
Esther Guerrero revalidó su corona en el 800 con superioridad insultante: 2:05.28, dos segundos y medio de ventaja sobre la segunda, Laura Valdés.
Arian Olmos Téllez volvió a ser el rey del esprint corto con una marca de 6.72, tres centésimas mejor que Mario López. Al plusmarquista español, Ángel David Rodríguez, se le sigue resistiendo el sexto título. Llegó séptimo con 6.87.
En 400 metros, al día siguiente de batir su récord personal con 46.80, el toledano Lucas Búa, de 22 años, actual campeón al aire libre, volvía a la carga en busca de la décima de segundo que el sábado le había separado de la mínima mundialista.
En semifinales Búa pasó el 200 en 21.85, demasiado rápido. Hoy lo hizo en 22.28 y le fue mucho mejor: 46.65, récord personal, billete para Portland y séptimo lugar en el ránking histórico español. El madrileño Mark Ujakpor llegó segundo en 47.14.
Aauri Lorena Bokesa no tuvo rival en 400. Faltaba la anterior campeona, Indira Terrero, de modo que el triunfo de la exjugadora de baloncesto madrileña resultó sencillo. Su cuarto título llegó con una marca de 53.39 y ahora se tomará un descanso, pues ha renunciado a competir en los Mundiales de Portland, para los que tenía mínima. Geraxane Ussía fue segunda con récord personal (54.10)
La balear Caridad Jerez ratificó su hegemonía en vallas con un registro de 8.25, 27 centésimas más rápida que la segunda, Nora Orduña, aunque sigue dudando si acudir a los Mundiales.