Fernando Pérez Soto.León, 28 ene .- La campeona del mundo de halterofilia Lydia Valentín cree que aún no ha tocado techo pese a su trayectoria repleta de éxitos, con un 2017 en el que ganó los títulos mundial y europeo, además de recibir el pasado 16 de enero la medalla olímpica de plata (Pekín 2008) tras la sanción por dopaje de sus rivales.
La haltera de Camponaraya (León), que este sábado recibió el homenaje de su localidad natal, se muestra convencida de que puede estar todavía "a mejor nivel en este ciclo olímpico, hasta Tokio 2020", ha explicado en una entrevista con la Agencia Efe.
Tokio 2020, sus cuartos Juegos Olímpicos, supondrán su despedida como deportista de alto rendimiento "aunque nunca nada se pueda asegurar al cien por cien", pero para entonces habrá "dado todo" por lo que "sería un año bonito para una retirada".
De todas maneras, tiene decidido que tras abandonar el alto nivel continuará ligada al deporte y a la halterofilia porque ha sido su "pasión" durante muchos años, y tiene claro que morirá siendo deportista desde cualquier función.
Lydia Valentín ha agradecido el reconocimiento recibido ayer en Camponaraya "porque a pesar de todos los homenajes, ninguno se parecerá nunca al que te pueden dar tu pueblo y tu gente".
Respecto a la posibilidad de que lleguen más medallas "retardadas", por la sanción por dopaje de alguna de sus rivales, en cualquiera de los campeonatos en los que ha tomado parte en los últimos años, ha asegurado que no le extrañaría, aunque es algo que no piensa, sino tan solo en recibir la medalla de Londres 2012 que está pendiente.
La próxima semana se reunirá con el presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco, quien le comunicará cómo se encuentra todo el proceso para la adjudicación de la medalla de oro de los Juegos Olímpicos de la capital británica tras la descalificación por dopaje de las tres halteras que le precedieron en la clasificación.
"Es un capítulo que espero que se pueda cerrar ya con algo que es justo para poder pasar página y mirar hacia adelante", ha declarado.
En cuanto a las cantidades que le corresponden por las medallas olímpicas en concepto de premios y becas, Lydia Valentín ha manifestado que "es difícil que se pueda recompensar todo lo perdido".
"Está claro que la mejor recompensa es el cariño de la gente", ha concluido.