El paratriatleta andaluz José Manuel Candón se ha mostrado este miércoles "orgulloso" tras proclamarse el pasado fin de semana campeón del mundo en categoría Tándem en el Mundial de Triatlón-Cross 'Xterra' que se ha celebrado en la isla de Maui (Hawai).
El deportista nacido en Medina Sidonia (Cádiz) y afincado en Chiclana de la Frontera, acompañado por su guía Jonathan Macías, ha conseguido convertirse en el primer deportista con discapacidad visual que supera esta dura prueba, al finalizar cuarto en la categoría Desafío Físico y, a su vez, primero en Tándem.
La pareja tuvo que superar un primer sector de natación de 1.500 metros en un mar "embravecido" en aguas de Kapalua, definió Candón en declaraciones a Efe a su vuelta a España.
Posteriormente, afrontaron un sector de bicicleta "durísimo", al estar cubierto el suelo por una gran cantidad de barro debido a las lluvias.
La prueba finalizó con una carrera de trail sobre diez kilómetros y medio por el interior de la selva de la isla, soportando un calor "sofocante" y un elevado porcentaje de humedad, analizó Candón.
El atleta gaditano ha agradecido a su vuelta a España la confianza de los amigos, empresas, asociaciones e instituciones que le ayudaron a participar y a afrontar los gastos del viaje a través de una campaña de mecenazgo.
Candón y Macías han sido los únicos deportistas españoles con discapacidad en la prueba, entre los ochocientos participantes de cincuenta países presentes en el certamen.
José Manuel Candón es un militar oficial desactivador de explosivos retirado que durante la preparación de una misión para acudir a Líbano sufrió un accidente en 2011 en acto de servicio en el campo de tiro de El Palancar, en la Academia de Ingenieros de Hoyo de Manzanares (Madrid).
En ese accidente murieron cinco compañeros suyos y este gaditano sufrió, entre otras secuelas, la pérdida de un ojo y haber quedado con una visibilidad máxima del quince por ciento en el otro.