La regla 163.4 de la IAAF que costó al español Óscar Husillos la medalla de oro en los Mundiales en pista cubierta de Birmingham y la de plata al dominicano Luguelín Santos, en marzo pasado, no ha sido modificada, finalmente, por el Consejo Directivo, reunido en Montecarlo.
La Comisión Técnica había elevado al Consejo una propuesta para que la primera infracción de esta regla (pisar la calle adyacente) en pista cubierta no conllevara descalificación, como ocurrió con gran cantidad de atletas en Birmingham (Reino Unido).
Pero algunos miembros del Consejo alegaron, para no cambiar la norma, que el problema ocurrido en los Mundiales de Birmingham tuvo una relación directa con las especiales características de aquella pista y que el fenómeno no era extensible a la competición en general.
La descalificación de Husillos, vencedor en la final de 400 metros, se produjo por rozar de forma inapreciable para el ojo humano la calle adyacente, y el segundo clasificado, el dominicano Luguelín Santos, corrió la misma suerte, de forma que el título mundial bajo techo fue para el que había sido tercero, el checo Pavel Maslak, quien declaró que el oro le supo a bronce.
"Después del desastre de Birmingham la comisión de Competición estuvo examinando el caso y se resolvió presentar la modificación, que sólo sería aplicable en pista cubierta debido a las peculiaridades de la pista, sus curvas y peraltes. La primera vez que se pisara la línea no acarrearía descalificación", explicaron a EFE fuentes del Consejo Directivo.
La propuesta ahora rechazada pretendía corregir la aplicación rigurosa del reglamento en casos como el de Husillos y Santos, que a juicio de varios expertos no constituyeron ventaja alguna para el infractor.
La ruleta de las descalificaciones en los Mundiales de Birmingham dio lugar al hecho insólito de que todos los atletas de una misma serie resultaron eliminados.
El español había ganado la carrera tras avasallar a sus rivales con una marca de 44.92 que habría sido la mejor en la historia de los campeonatos y nuevo récord de Europa.
Luguelín Santos, subcampeón olímpico en Londres 2012, llegó segundo con 45.09, que habría sido nuevo récord nacional, y el checo Pavel Maslak, dos veces campeón, había llegado tercero con 45.47.
De no haber sido descalificado, Husillos habría borrado de las listas el viejo récord de Europa del alemán Thomas Schoenlebe (45.05), que databa de hace treinta años, del 5 de febrero de 1988.
La IAAF sugirió que los atletas deberían entrenar más en pista cubierta para evitar descalificaciones. Junto a la resolución por la que el Jurado de Apelación desestimó la reclamación española, la IAAF, saliendo al paso de las críticas por las numerosas descalificaciones, añadió una nota en la que recordaba las particularidades de la pista cubierta, diferentes a las de aire libre, particularmente en las curvas.
"La curva es una zona especialmente complicada porque", recordó la IAAF, "afecta a la fuerza centrífuga cuando los atletas pasan de las curvas cerradas a las rectas".
A continuación amonestaba a los atletas: "Las carreras en sala son un tipo especial de competición y muchos atletas dedican muy poco tiempo a entrenar en pista cubierta" y recomendaba: "Una mayor adaptación a las diferentes pistas antes de las competiciones podría ser una forma de reducir estas infracciones".