Las sanciones marcan el 2018
Las sanciones a perpetuidad para el exciclista y director de equipos belga Johan Bruyneel y el médico español Pedro Celaya por participar una década en una trama de dopaje, junto a otra condena para un médico que abusó de gimnastas en Estados Unidos son los grandes borrones del deporte en 2018.
El año arrancó conmocionado por el positivo del ciclista británico Chris Froome en la edición de la Vuelta a España 2017 y muy pendiente de lo que ocurriría con los deportistas rusos ante la celebración de los Juegos Olímpicos de Invierno en PyeongChang.
A poco más de un mes, el aperitivo a éstos lo puso el presidente ruso, Vladímir Putin, al llamar "imbécil" al exjefe del laboratorio antidopaje de Moscú Grigori Ródchenkov, cuyas revelaciones fueron clave para que la Agencia Mundial Antidopaje concluyera que Rusia incurrió en dopaje de Estado en Sochi 2014.
Pero esto no alteró la situación de Rusia para Pyeongchang, donde no pudo participar como equipo, ni tampoco la decisión del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) de exculpar a 13 atletas rusos. Los atletas de Rusia compitieron en Corea bajo bandera olímpica y dos de ellos dieron positivo.
Prácticamente a la vez se llevó a cabo el juicio al médico del equipo de gimnasia de EEUU, Larry Nassar, en el que fue condenado en el estado de Michigan a un mínimo de 40 y un máximo de 125 años de prisión, por abusar sexualmente de sus pacientes.
Pronunciada en febrero, ésta fue la tercera sentencia en contra de Nassar -en diciembre de 2017 fue condenado a 60 y en enero de este año a otra pena de entre 40 y 175-.
Más de un centenar de víctimas expusieron sus testimonios en un juicio casi de película. La jueza Rosemarie Alquilina dijo de forma figurada haber "firmado la sentencia de muerte" del acusado. El padre de una de las deportistas le pidió que le dejara "estar a solas con ese demonio" ante su negativa se abalanzó sobre Nassar y tuvo que ser reducido. El médico dijo que jamás olvidaría las palabras de sus víctimas.
Asociados al dopaje en 2018 hay que mencionar los nombres de Chris Froome y el futbolista peruano Paolo Guerrero.
El primero, tras meses con un positivo por salbutamol (broncodilatador permitido hasta un cierto nivel), recibió la luz verde para participar en el Tour cuando la UCI aceptó la versión de la AMA según la cual su muestra no constituía un positivo y resultaba de un uso permitido de ese medicamento.
El capitán de la selección peruana tuvo que pelar para poder jugar el Mundial de Rusia y finalmente lo consiguió. Guerrero dio positivo por un metabolito de la cocaína tras un partido de clasificación para el Mundial, en octubre de 2017 con Argentina.
La sanción de la FIFA y el rechazo del recurso de Guerrero en el TAS le obligaban a cumplir 14 meses de sanción que le habrían impedido estar en Rusia si el Tribunal Federal Suizo no hubiera levantado la sanción provisionalmente como hizo a finales de mayo.
El mismo tribunal, ya jugado el Mundial, revocó su decisión y volvió a sancionar al futbolista por los ocho meses que le quedaban.
Impactante fue después cómo se resolvieron los casos pendientes en el TAS sobre al exciclista y director de equipos belga Johan Bruyneel, el médico español Pedro Celaya y el entrenador José Martí.
El tribunal suspendió en octubre a perpetuidad los dos primeros y durante 15 años al segundo tras entender probado que entre 1997 y 2007 los tres "participaron en una elaborada y enormemente eficaz trama de dopaje" en la que el antiguo corredor era "el vértice" y Martí y Celaya "participantes imprescindibles" en un "extenso y sistemático programa de dopaje".
Bruyneel dirigió en esa etapa el equipo US Postal del estadounidense Lance Armstrong, dopado confeso y ganador de siete Tours de Francia entre 1999 y 2005, que luego le fueron retirados.
Entre los doce meses que ahora acaban todavía hubo chispazos del llamado "FIFA-GATE". El TAS mantuvo los diez años de inhabilitación para el secretario general de la FIFA en la última etapa del presidente Joseph Blatter, Jerôme Valcke, y el expresidente de la Federación Costarricense Eduardo Li fue condenado en Estados Unidos a dos años de libertad vigilada en relación a este caso.
La renuncia del jeque kuwaití Ahmad Al-Fahad Al-Sabah a sus cargos en el COI y en la Asociación de Comités Olímpicos Continentales (ACNO), acusado por la fiscalía suiza de elaborar con cómplices vídeos falsos para perjudicar a miembros del gobierno de Kuwait, fue otro de los titulares del lado oscuro del deporte, que en dos meses espera el comienzo del juicio al expresidente del Fútbol Club Barcelona, Sandro Rosell, por blanqueo de dinero.