El español Fernando Alarza, que acabó cuarto el Mundial de triatlón después de finalizar tercero la Gran Final disputada este sábado en Lausana (Suiza), manifestó a Efe que está "súper-contento" porque "una medalla en la Gran Final no es una medalla cualquiera".
"Una medalla en una Gran Final no es como ganarla en cualquier otra carrera. Es una de las carreras de más nivel del año", explicó Alarza, nacido hace 28 años en Talavera de la Reina, que acabó tercero la Gran Final, a 31 segundos del ganador, el noruego Kristian Blummenfelt.
"He acabado cuarto el Mundial y en el Mundial no ha habido medalla, pero estoy súper-contento de igual manera, porque hemos estado los tres españoles en las fotos de los podios", comentó Alarza, en referencia a sus compatriotas el mallorquín Mario Mola, que acabó segundo la Gran Final y el campeonato -que ganó el francés Vincent Luis-; y el gallego Javier Gómez Noya, único quíntuple campeón mundial de la historia, que capturó el bronce en el certamen después de acabar sexto la carrera.
"Me hubiese gustado estar en el podio final, pero estoy satisfecho, porque hice todo lo que pude; y no ha podido ser. El podio final del Mundial ha sido justo"; explicó a Efe Alarza, subcampeón de Europa el año pasado en Glasgow (Escocia) y bronce en el Mundial de 2016, que concluyó en Cozumel (México).
"Siempre se me daban mal las Grandes Finales, llegaba mal al final de la temporada; y esta vez ha salido todo muy bien", comentó Fernando, que acabó el Mundial con 4.395 puntos, 700 menos que el flamante campeón, Vincent Luis.
"Le estoy muy agradecido a mi entrenador, Roberto Cejuela. Estoy muy contento, porque la prueba ha sido durísima. Han sido catorce subidas (en el segmento ciclista) con una intensidad tremenda, con calor y mucha humedad", dijo.
"Estoy muy contento, porque los tres españoles hemos hecho una gran carrera"; comentó a Efe desde Lausana este sábado Fernando Alarza.