Ana Peleteiro, recién llegada del Campeonato Mundial de Atletismo en Doha, explicó que lo vivido en Catar no ha sido del todo agradable, no sólo a nivel deportivo, ya que no pudo pasar de la sexta plaza, sino a nivel personal por la enorme diferencia cultural que existe con el país anfitrión.
Sobre su estancia en Doha afirmó haberse sentido incómoda en alguna ocasión como una vez que se puso en pantalón corto para entrenar en el gimnasio del hotel y los locales se le quedaron mirando y empezaron a grabarle con el móvil. Además, en una entrevista a Marca, Peleteiro destacó que "lo del público ha sido vergonzoso, muy triste. Me da pena, pero es un campeonato que se decidió con el anterior presidente. El público, además, no entendía nada de atletismo. Pedías palmas y no sabían qué tenían que hacer". No obstante, también indicó que "en el estadio todo era más normal, el problema era fuera del recinto, cuando hacías vida normal. También para los amigos que venían a vernos desde otros países. No había nada que hacer, solo ir de compras".
La atleta gallega entrena en Guadalajara con la campeona del mundo en Doha, la venezolana Yulimar Rojas, a quien evitó en los Mundiales. “No quería encontrarme con una persona supermotivada y en excelente estado de forma, mientras que yo trataba de centrarme en mis dolencias", confesó Peleteiro.
Comentó que, a nivel personal, finalizó Doha con “mucha rabia” por haber quedado en sexta posición debido a las molestias físicas que arrastraba en la planta del pie y en los isquios. “Ahora en perspectiva sé que debo estar contenta, porque dos semanas antes de los mundiales, me planteaba no ir” y admitió que con los años y los logros, se ha vuelto una persona “muy ambiciosa”.
Con su entrenador el cubano Iván Pedroso, ha aprendido “la ambición”; cómo desligarse de los problemas leves para centrarse en la competición y en las problemas importantes. "Reconozco que soy una privilegiada, me gusta mi trabajo”, reconoció y de ahí saca la fuerza que le pide su técnico por el que siente un gran aprecio. “Tiene consejos a veces, un poco como mi abuela, de sabiduría de la vida”.
Peleteiro destacó el papel de los profesionales de la Real Federación Española de Atletismo (RFEA) para intervenir en el caso de Orlando Ortega, al que finalmente se le otorgó la medalla de bronce en los 110 metros vallas de los Mundiales de Doha.
“España no es una gran potencia dentro del atletismo, no tenemos el peso que pueda tener Francia, por ejemplo, pero sí tenemos grandes profesionales en los despachos”, opinó.
Con estas palabras la gallega alabó el trabajo de Carlota Castrejana al frente del equipo que peleó los recursos y que no se dio por vencido: “Se han dejado la piel para que fueran justos con Orlando y lo han conseguido”.