La noticia saltaba el sábado 23 de octubre, un día antes del arranque del Campeonato de España de Pádel (CEP). El cuadro femenino decidía no presentarse al torneo por lo que las jugadoras consideran una situación de discriminación machista: que solo se pague incentivos económicos por el mero hecho de participar a unos pocos jugadores hombres y a ninguna mujer. Sin embargo, lo que en un principio parecía un plante en bloque de todas las mujeres, ha resultado no ser unánime y ocultar presiones e insultos de algunas jugadoras de élite a otras amateur para convencerlas de no presentarse al torneo.
Por resumir la cronología de lo sucedido. Unos días antes de empezar el torneo (que ha arrancado el pasado domingo 24 de octubre) un grupo numeroso de jugadoras pro (las que juegan la World Padel Tour, fundamentalmente) se entera de que algunos jugadores hombres pro van a cobrar por participar. Los premios del CEP son idénticos para cada cuadro, 30.000 euros, pero estos incentivos personales parten de los patrocinadores privados del evento y van a unos pocos jugadores, los más conocidos, para hacer más atractivo el torneo. Al enterarse de que algunos jugadores hombres cobrarán por el mero hecho de participar, las jugadoras inician una votación entre muchas de las palas femeninas apuntadas al torneo para decidir si deben retirarse del campeonato. Una votación que culmina con la decisión entre todas de firmar un documento en el que trasladan a la Federación Española de Pádel su decisión de no presentarse. Esta decisión, sin embargo, no es unánime ya que algunas jugadoras deciden que sí quieren jugar. De hecho, finalmente serán siete parejas las que disputarán el torneo en el cuadro femenino.
Así las cosas, algunas de las jugadoras de menor nivel, entre ellas Beatriz Bilbao y Rebeca Molero, denuncian que, en primer lugar, no fueron ni siquiera informadas de dicha votación ni se contó con su opinión. Simplemente se les informó a última hora de que debían firmar ese documento de renuncia al campeonato para ir todas a una. En segundo lugar, lo más grave, aseguran que han recibido presiones y comentarios de desprecio por parte de sus compañeras ante su decisión de no unirse a las jugadoras de la élite en su lucha y seguir adelante con su intención de participar en el torneo. Este medio ha tenido acceso a algunas conversaciones de Whatsapp en las que se pueden leer algunos de esos comentarios. “Queremos nombres” y el emoticono de un cuchillo, “les daremos el trofeo de las retrasadas” o “a las que jueguen no se las va a admitir después en la asociación de jugadoras”, son algunos de los comentarios. Una situación que llevó a la propia Federación Española de Pádel a lanzar un comunicado en el que exigía que cesaran las presiones y mensajes intimidatorios.
Sin dejar de criticar a la organización del Campeonato de España por haber permitido la discriminación entre hombres y mujeres a la hora de pagar por participar, Rebeca y Beatriz denuncian las presiones de algunas compañeras a otras para no presentarse. Ellas saben que, con su nivel, jamás aspirarán a ganar dinero jugando al pádel, igual que les sucede a muchos jugadores del cuadro masculino (que tampoco recibirán dinero alguno por participar). Por eso, defienden su derecho a decidir libremente y sin presiones si quieren o no jugar. El sábado 23 la propia organización del torneo publicó un cuadro femenino en el que aún figuraban 14 parejas. Sin embargo, a medida que han ido pasando los días, aseguran Beatriz y Rebeca, la mayoría de esas jugadoras que sí estaban dispuestas a jugar se han ido dando de baja del torneo por culpa de las presiones. Ante esta circunstancia, el cuadro femenino ha ido viendo reducido su tamaño hasta quedar en siete parejas que empezarán a jugar desde cuartos de final. Todas formadas por jugadoras que, en principio, habría sido impensable que llegaran tan lejos en el torneo si las palas pro sí se hubieran presentado. Desde la Federación recuerdan a este medio, además, que el premio de 30.000 euros para el cuadro femenino seguirá siendo de la misma cantidad pese a la reducción de participantes. Toda esta situación ha provocado que la competición femenina empieza este viernes 29 de octubre desde ronda de cuartos de final y con una de las parejas ya en semifinales.
Por su parte, la jugadora Lucía Sainz, en el top 5 mundial y habitual de la World Pádel Tour, ha transmitido a este medio su rechazo a las presiones o mensajes intimidatorios que denuncian las jugadoras amateur. “Todas las jugadoras son libres de participar o no en el Campeonato, y tanto respeto merecen las que han decidido participar como las que no, siendo inaceptable y reprobable cualquier presión para modificar la decisión que libremente haya tomado una jugadora. Y si alguna jugadora ha sido presionada, cuenta con nuestro total apoyo para que tome sus decisiones sin presiones y con la más absoluta libertad”.
Este es el nuevo feminismo que campa a sus anchas y sin freno, que viene a decir que si no piensas igual que yo estas contra mi y te amenazaré hasta que hagas lo que yo diga. Total eso tiene un nombre y termina en f…cismo. El artículo habla de que solo algunos y muy pocos hombres conran esa prima, y que viene de patrocinadores PRIVADOS, no he visto que ningún hombre que no cobre la prima se haya quejado de machismo ni discriminacion. Vale ya de usar el machismo en conveniencia y para sacar ventaja. Si no os va bien algo, pues se dice, pero no se mete el machismo con calzador.
Ponyboy, me estás diciendo que Javi Rico es más famoso que Alejandra Salazar, Lucía, Gemelas .... Al patrocinador se le ha ido de las manos y la ha cargado.
El patrocinador no les paga más por ser hombres, les paga más por ser las estrellas de su deporte, y al asegurarse la participación de los jugadores más conocidos y carismáticos, saben que el torneo tendrá más tirón y más repercusión... y, en definitiva, venderán mas entradas y ganarán más dinero. Es como si en una película de Tom Cruise, alguna actriz de reparto se quejara de que cobra menos que Tom Cruise, y tratase de boicotear el rodaje. Algunos jugadores cobran más por ser MAS POPULARES, no por ser hombres. El patrocinador tonto no es.