Tras la Navidad de 2018, Sonia Franquet decidía romper su relación con su compañero en el equipo nacional de tiro, Jorge Llames, por culpa de una situación totalmente insostenible. Una decisión meditada por lo sucedido en los últimos años, que se remontaba a los días previos a los Juegos Olímpicos de Londres 2012, cuando su entonces pareja mostró una reacción en público contra ella que sorprendió para mal a todos los presentes.
Con el paso de los años, la relación fue empeorando pero Sonia siempre creyó que su comportamiento cambiaría y que la agitada vida de la competición podía estar generando esas conductas. Poco a poco, la situación se volvió inaguantable, cuando el tirador comenzó a sobrepasar su independencia y espacio. "Miraba con quién me enviaba mensajes y parecía que tenía que pedirle permiso para cualquier cosa cotidiana". La tiradora tarraconense decidió romper la relación y todo empeoró aún más.
Los primeros meses de 2018 se volvieron un suplicio en la vida de Sonia Franquet: "Me vigilaba si estaba en casa y me seguía con su coche, tuve que cambiar mi número de teléfono”, nos desvela a El Desmarque. "Hablé con especialistas en problemas de violencia de género y me avisaron de que sus comportamientos seguían todos los estándares y que tenía que parar la situación lo antes posible. Soy policía y me dijeron que qué haría si alguien viene a contarme lo que yo estaba contando, qué les aconsejaría. Mi respuesta fue denunciar", ampliaba la tiradora española. Durante esas semanas, Sonia informó al propio presidente de la federación, Miguel Francés, de lo que estaba ocurriendo y este le pidió que no denunciara.
En la celebración de la Copa del Mundo de tiro olímpico en Changwon (Corea del Sur) y lo que allí sucedió, convenció a Sonia de que era el momento de denunciar a su ex pareja. Había avisado a la federación española de tiro olímpico de su situación y les pidió que hablaran con él, que lo tuvieran controlado en sus movimientos. Llames dio su palabra a la federación pero la incumplió. A su vuelta, a principios de mayo, Sonia acudió al juzgado a interponer la denuncia.
Unos días después, Franquet ganó el oro en la prueba mixta de la Copa del Mundo de Columbus (Estados Unidos), lo que provocó otro encuentro con el presidente de la federación: “Me pidió que quitara la denuncia porque el tiro estaba mal visto por ser un deporte de armas y daba mala imagen”. Peor fue la reacción del Consejo Superior de Deportes (CSD) que no respondió a los mensajes enviados por Sonia durante esos meses. “Parecía que yo era la mala de la historia. Si no querían ayudarme, vale, pero que encima no me fastidiaran”, recuerda la deportista de Ascó.
Con la denuncia y la apertura del proceso judicial, el juzgado retiraba el permiso de armas a Jorge Llames que dejaba así de poder practicar su deporte. Algo que causó uno de los momentos más desagradables de todo este tiempo. En una competición nacional, Franquet tuvo que soportar como algunos amigos del tirador acudieran por sorpresa a mostrarle su apoyo frente a ella: “Aparecieron con camisetas que ponía ‘Llames Team’. Cuando los vi, me dio un vuelco al corazón. Les pregunté qué hacían y me dijeron que defendían a su amigo porque le había quitado el permiso de armas de manera injusta”.
En marzo de 2021, el juez condenó a Llames por un delito de acoso al considerar probados los hechos denunciados. En la sentencia, a parte de los reiterados mensajes y llamadas y las persecuciones en coche, se destacan otras actitudes del condenado: como el visionado de las grabaciones de las cámaras de seguridad de la vivienda de su ex pareja, con el objetivo de controlar el lugar y las compañías, o sus constantes acercamientos por los alrededores del domicilio.
El principal problema de la sentencia era su vigencia: la orden de alejamiento a 500 metros se fijaba durante tres años a partir de la fecha de la denuncia, por lo que en solo dos meses todo estaría como si nada hubiese sido juzgado. Además, también le devolvía el permiso de armas de manera inmediata por lo que se volverían a encontrar en entrenamientos y competiciones.
Tras el cumplimiento de la condena, Jorge Llames no tardó en volver a aparecer por Club de Tiro de Trasona donde había entrenado siempre con Sonia Franquet. Lo que provocó que la tiradora tuviera que marcharse en más de una ocasión a casa para no compartir instalación con él. En un primer momento, la federación -que pidió disculpas por la mala gestión de la situación tras la denuncia- le dejó un blanco de tiro para poder entrenar en casa pero un cambio en la dirección de competición forzó a que Sonia lo devolviera. Esto provocó que tuviera que buscar un cambio de club de entrenamientos para poder seguir compitiendo: “El volvió a entrenar a mi club y yo me tuve que ir”, confiesa la catalana a ElDesmarque.
Al mismo tiempo, Llames siguió entrenando en Trasona y empezaba a competir en eventos nacionales hasta que el pasado 4 de agosto conseguía la mínima para el Mundial de tiro, que se disputará a partir del próximo 12 de octubre en El Cairo (Egipto). Los fantasmas vuelven a perseguir a Sonia Franquet, que también había conseguido la marca mundialista unos días antes, por lo que coincidirá con el que fuera su acosador, de nuevo, en el equipo nacional.
“He mandado un escrito a la federación para que hagan los posible para que no estemos juntos”, nos desvela la tiradora, “y ellos han mandado mi escrito al Consejo Superior de Deportes”. La respuesta del organismo no deja indiferente. Según Franquet, el CSD ha respondido que “el protocolo lo tiene que hacer la federación, que para el CSD (Jorge Llames) es un deportista más y que está para velar por todos los deportistas por igual… y que el protocolo ya lo decida la federación”. Como pasó en 2018 y 2019, el CSD desampara de nuevo a la deportista española en esta difícil situación. Según hemos podido confirmar, la federación sí ha intentado una alternativa para la estancia en Egipto pero le está siendo complicado por la seguridad y disponibilidad de El Cairo.
Por lo tanto, y si no hay novedad en los próximos días, Sonia Franquet tendrá que reencontrarse en el equipo nacional con el que fuera, según la Justicia, su acosador durante varios meses aunque, si todo va según lo previsto, serán dos días en suelo egipcio. “La vida se me ha complicado muchísimo desde 2018”, nos termina diciendo Franquet con voz entrecortada. Por cierto, no la busquen en redes sociales: las tuvo que borrar para no leer los comentarios que le llegaron.
Resulta increíble que la Federación no haga nada y más increíble que sus "amigos" se manifiesten contra ella sin que las Federación tampoco tome medidas. País...