El lateral izquierdo del Ángel Ximénez, Juan Antonio Vázquez 'Chispi', ha dicho hoy sobre su ausencia en la convocatoria del seleccionador nacional, tras ser máximo goleador de la Liga Asobal, que "si no" fue "ahora con España" no irá nunca, "era el momento para probar".
El jugador sevillano acabó la temporada con 216 goles, lo que supone una media de 7,2 tantos por partido aunque se perdió dos por lesión, guarismos con los que aventajó en más de treinta goles al extremo del Abanca Ademar León, José María Carrillo. Chispi ha señalado a Efe que a la selección "hasta ahora iban jugadores de equipos de la Liga de Campeones", pero tras la inclusión en su puesto del navarro Iosu Goñi del Pays d'Aix UC francés, un equipo "asimilado" al de Puente Genil con el que logró sesenta goles, ha apuntado que debe ser porque influyen "los gustos personales de cada uno". "Tiene que ser que no le gusto", ha apuntado Chispi sobre el seleccionador nacional, Manuel Cadenas, que en otras ocasiones también ha citado al cordobés Carlos Molina y que en opinión de Chispi "tiene que llegar" a ser un fijo, y ha añadido que "ahora mismo no puede haber comparación por rendimiento, tiene que ser más por edad".
El hispalense cumplirá 32 años en noviembre y ha militado hasta en once clubes, con dos experiencias en el extranjero en Francia y Rumanía. El galardón de máximo goleador ha sido la primera vez que lo gana en una máxima categoría, porque ya lo logró en la temporada 2007-08 cuando militaba en el ARS de Palma del Río, pero en la División de Plata, y ha señalado que "nada es comparable conseguirlo en la Asobal y además en un club modesto", lo que supone ser "la referencia y eso cuesta más trabajo porque los rivales te defienden más". "Creo que marcar 216 goles es una barbaridad. Durante la temporada no le hice caso y quería esperar hasta el final, ahora que lo conseguí le doy bastante valor y me sitio orgulloso", ha apuntado Chispi que fue el pichichi desde la primera a la última jornada.
Todo ello tras una temporada "muy larga y lo que queda", ya que el Ángel Ximénez aún le resta la fase final de la Copa del Rey en la que se medirá al FC Barcelona en la primera de las semifinales, aunque para Chispi la nota que le da a la campaña es "muy buena, un ocho". En su balance, el jugador ha dicho que todo empezó "muy bien", tanto que "parecía que se iba hacer algo más importante de lo hecho", pero en su opinión aquel inicio, con triunfo en Huesca, "no era realidad", algo que se confirmó en "octubre y noviembre, dos meses malísimos y duros debido a lesiones y malos fichajes", algo que en su opinión "lastró toda la temporada porque de haber sumado algo más en ese tiempo habría sido brillante el año". Posteriormente la segunda vuelta "se comenzó como un tiro hasta conseguir la clasificación para la Copa", tras lo que se produjo "una cuesta abajo porque el equipo pensó que la temporada estaba echada y se ofreció un bajón el nivel competitivo aunque la guinda al pastel ya se había puesto con la Copa, que ahora tocará disfrutarla", ha concluido Chispi.