España llega con "chispa" al tramo decisivo del campeonato

"Cada día me encuentro mejor, físicamente me encuentro mucho más rápido y en general el equipo tiene esa misma sensación de estar cada día mejor", señaló el portero Gonzalo Pérez de Vargas, unas buenas sensaciones que confirman los datos que maneja el preparador físico del equipo español, Jesús Rivilla."Las sensaciones de los jugadores son de tener chispa, de tener ese puntito de fuerza combinada con explosividad que te hace afrontar los partidos con la confianza de que puedo hacer todo lo que está dentro de mis posibilidades, creo que estamos muy cerca del punto óptimo de cada uno de los jugadores", señaló Rivilla en declaraciones a EFE.
En este sentido, el preparador físico de la selección española aseguró que el objetivo en lo que resta de campeonato será "no perder esa chispa" y, sobre todo, gestionar la posible fatiga que lastre el rendimiento de los jugadores.
"Debemos gestionar dos cuestiones. La primera que no perdamos la chispa y para eso tiene que haber en los entrenamientos pequeñas dosis de fuerza explosiva y velocidad casi diarias y por otro lado tenemos que estar muy pendientes de no generar una carga de trabajo que conlleve fatiga", explicó Rivilla.
Para ello, el preparador físico viene desarrollando no sólo durante el Europeo, sino a lo largo de todo el año, planes de trabajo individualizados con cada jugador que permitan a los internacionales afrontar en el mejor estado posible la parte final del campeonato.
"A lo largo de este año hemos ido progresivamente trabajando en la individualización, a día de hoy cada jugador tiene su programa individual que vamos retroalimentando y modificando según las propias sensaciones de cada jugador", indicó el preparador físico.
Un trabajo que se ha visto beneficiado por las numerosas rotaciones que el técnico español, Jordi Ribera, ha realizado desde el inicio del torneo y que ha permitido a los internacionales españoles no llegar excesivamente castigados al tramo final del Europeo.
"Que el cuerpo técnico haya distribuido tan bien los minutos entre todos los jugadores nos genera un margen muy amplio hasta llegar a la fatiga acusada", comentó Rivilla.
A este respecto, el preparador físico señaló que la planificación del equipo estaba diseñada para el equipo llegar a la mitad del Europeo -si España logra acceder a la lucha por las semifinales aún le quedarían por disputar cuatro partidos- en un momento óptimo.
"Ya queríamos estar en un punto excelente ante Dinamarca, pero en ese partido las cosas no nos salieron excesivamente bien, pero sí que es verdad que teníamos planificado que el equipo estuviera bien a mitad de campeonato y teniendo en cuenta el momento de temporada creo que el equipo esta muy cerca de su tope físico", comentó Rivilla.
Un hecho que hace ser optimista al preparador físico sobre las opciones del conjunto español en los dos encuentros de la segunda fase que aún le quedan por disputar ante Eslovenia y Alemania y en los que los "Hispanos" se jugarán el pase a las semifinales.
"Veo a los jugadores con muy buenas sensaciones físicas y lo mejor de todo es que todos hablan de una evolución ascendente. Esa es para mí nuestra principal baza, que las sensaciones del equipo son de ir hacia arriba", concluyó Rivilla.