Francisco Blázquez, presidente de la Real Federación Española de Balonmano (RFEBM), afirmó este martes que el torneo Internacional que disputará la selección española femenina en Alicante será una prueba exigente y dura con vistas a su preparación para el próximo Campeonato de Europa.
El dirigente de la RFEBM ha presentado, junto al alcalde de la ciudad, Luis Barcala, el vicepresidente de la Diputación provincial, Eduardo Dolón, y la edil de Deportes, Maris Gayo, en el Ayuntamiento de Alicante la XXII edición del Torneo Internacional de España, en el que participarán, además del combinado español, Alemania, Brasil y Polonia del 23 al 25 de noviembre.
Francisco Blázquez recordó que la selección femenina está "en auge" y que era un objetivo de la federación era visitar Alicante tras la excelente experiencia del pasado año de la selección absoluta masculina.
"Creemos en la igualdad a todos los niveles y en el despegue del deporte femenino", dijo el presidente de la federación, quien indicó que el torneo y la presencia de las Guerreras en Alicante también ayudarán a potenciar la marca turística de Alicante.
En este sentido, Blázquez, que entregó una camiseta de las Guerreras a los representantes de las instituciones alicantinas, señaló que las jugadoras de la selección gravarán en la ciudad varios anuncios de promoción que podrán verse durante el Europeo.
El presidente de la RFEBM también recordó la importancia de este torneo para "llegar en lo más alto a nivel de juego y confianza" a la próxima cita continental, en la que están en juego "los primeros billetes para los próxima cita olímpica en Tokio".
Francisco Blázquez adelantó la posibilidad de ampliar el cupo de sedes para el Mundial de balonmano femenino de 2021 con el objetivo de que pueda cubrir todo el arco mediterráneo y llegar "de Cataluña hasta Alicante".
Barcala afirmó que el balonmano es una de las "señas de identidad" del deporte alicantino y recordó los éxitos de equipos como Calpisa o Mar Alicante, mientras que Dolón agradeció a la federación que mire siempre "hacia el sur" para organizar un torneo que aúna "deporte y turismo".
Gayo destacó que las Guerreras "reflejan a la perfección los valores del balonmano" y anunció que las jugadoras de la selección aprovecharán su estancia en Alicante para realizar varios actos sociales de promoción del deporte.
El pabellón Pitíu Roche, con capacidad para 1.800 espectadores, será sometido a varias obras de mejora para acoger este torneo. El precio del abono para todo el torneo es de 25 euros, mientras que las localidades para presenciar los dos partidos de cada jornada costarán 10 euros.