España recibe mañana (20.15 horas) en la piscina Nova Escullera de Barcelona a Serbia, actual campeona mundial y europea, en la penúltima jornada de la fase preliminar de la Liga Mundial, con el pase a la Superfinal aún por definir.Las opciones, difíciles pero no imposibles, de España de acabar primera de grupo pasan por ganar a Serbia, líder invicta del grupo, por dos o más goles y a Francia, en la última jornada, y esperar que Montenegro venza en su visita a Serbia en el último partido. Los montenegrinos se enfrentan mañana a Francia.
Serbia lidera el grupo con 12 puntos, mientras que España es segunda con 6, los mismos que Montenegro, por lo que mañana le valdría con un empate para sellar su clasificación para la Superfinal y buscar así su cuarto título consecutivo.
Los españoles no lo tendrán fácil ante la selección que dirige Dejan Savic, aunque su derrota por la mínima (13-12) en la primera vuelta les hace albergar esperanzas de poder romper la racha invicta de los balcánicos en el torneo.
España no gana a su rival de mañana en partido oficial desde el Mundial de Barcelona de 2013, cuando la eliminó en la tanda de penaltis (14-13) en el encuentro clasificatorio para la disputa del quinto puesto. Desde entonces, los serbios han encadenado cuatro triunfos consecutivos.
La selección de Gabi Hernández vuelve a la competición después de su brillante clasificación para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro y acabar tercera en el preolímpico disputado a principios de este mes en Trieste (Italia).
Los jugadores del CN Terrassa Álvaro Granados y Agustí Pericas son las novedades de una convocatoria en la que no están respecto al preolímpico el capitán del equipo, Guillermo Molina, y el jugador del Atlético Barceloneta Balasz Sziranyi.