Primer triunfo europeo a domicilio
El VRAC demostró ante el Mogliano que no es un equipo más en la EPCR Qualifying Competition. Europa ha pasado de ser una utopía a ser una realidad y el Entrepinares mantiene intactas sus opciones de clasificación. La representación del rugby español está en buenas manos. Quedó claro en tierras italianas.
El Quesos tuvo, para empezar, personalidad. Hizo su partido sin pensar en el rival. Y de ahí que en el minuto 5 consiguiese adelantarse en el marcador, anotando los primeros puntos y dando un golpe moral al partido avisando de que iba muy en serio y que lo que quería era la victoria. Una buena acción del portugués Nuno Penha con el pie, buscando un globo que consiguió recepcionar Pedro de la Lastra, acabó con el marbellí ensayando y Griffiths colando entre palos el oval para sumar los siete primeros puntos del encuentro. La melé se mantenía igualada, como la touch, sin un dominador claro y con el encuentro abierto. Los locales se sentían cómodos buscando el juego a la mano, pero los vallisoletanos encontraron en su delantera un arma poderosa que terminó por ser decisiva para llevarse la victoria. El VRAC apretaba y conseguía un castigo que Griffiths hacía bueno poniendo el 0-10 en el marcador.
El Mogliano respondió por medio de una patada de Alessandro Onori que metía a los de Venetto en el partido. Más todavía con su primer ensayo, obra de Luca Esperandio, ratificado por Onori, y que ponía las tablas. Parecía que así se llegaría al descanso, pero el VRAC se resistió a perder la ventaja que había tenido durante toda la primera parte. Una buena carrera de Fede Castiglioni desde la veintidós, zafándose de varios rivales y sobre la línea lateral, puso el 10-15 con el que se llegaba al descanso y que hacía justicia a lo visto en la primera parte.
El partido se igualó tras el intermedio. Mogliano insistía a la mano, pero no fijaba, y el VRAC se esforzaba en los placajes para evitar males mayores. Un castigo para cada uno de los equipos, ambos sin transfomar, dejaban todo por decidir mediado el segundo tiempo. Los pucelanos volvieron a la carga en delantera, con dinamismo, y gracias a ello Gavidi colocó el 10-22, con el que se llegaría al final en el Stadio Maurizio Quaggia.
Gracias a este triunfo, y al del Timisoara frente al Fiamme Oro, el VRAC Quesos Entrepinares tiene oportunidades de clasificación pero no depende de sí mismo en el último partido de la fase de grupos en Portugal, depende de los resultados de Rovigo y del Heidelberg frente al Timisoras. El partido de Portugal, además, supone la pelea por la Copa Ibérica. Es la segunda vez en la historia del rugby que un equipo español gana en competición continental como visitante.