El patrón del VO65 español 'Mapfre', Iker Martínez, que esta mañana ha finalizado segundo en la séptima etapa de la Volvo Ocean Race ha señalado al llegar a tierra que "ésta era una etapa" que realmente querían ganar.
"Lo hemos intentado hasta el final; así que cuando lo intentas, todo es bueno", ha opinado.
"No podemos más que dar la enhorabuena a "Brunel", que lo ha hecho realmente bien los últimos dos días y no hemos podido ganarles", ha asegurado.
También ha valorado dos cosas muy importantes par,a el. "La primera, que ahora ya podemos decir que el 'Mapfre' ha conseguido dar la vuelta al mundo. En menos de un año hemos conseguido preparar un equipo y dar la vuelta al mundo, cosa que es realmente difícil. Todo el equipo tiene que estar muy, muy orgulloso de haber podido hacer eso y en tiempo récord. Quedan dos etapas y hay que pelearlas", ha explicado.
"La segunda ha sido la etapa en sí. Cruzar el Atlántico siempre es muy difícil y un segundo puesto sabemos que es muy bueno. La clave de la etapa, sin duda, ha sido cómo pasar el anticiclón de las Azores. De ahí hemos salido tres barcos muy juntos y a partir de ahí ya ha sido un tema más de velocidad y de manejo del barco".
Su compañero, Xabi Fernández, segundo patrón y jefe de guardia en la etapa, ha indicado: "Ha sido un cruce del Atlántico bastante tranquilo, mucho más de lo normal, y una vez más, muy cerca del primero y con los de detrás también apretando. Es un puesto muy, muy bueno. Lo único es que un rival directo como el "Brunel" ha ganado la etapa, pero estamos muy contentos con el resultado".
Por su parte, el vencedor de la etapa, el holandés Bouwe Bekking, patrón del 'Brunel' ha reconocido: "Hemos realizado una etapa extraordinaria y sólo al final se nos ha complicado debido a la caída del viento, pero conseguimos nuestro objetivo. Seguimos en el podio y hemos recortado puntos a los dos primeros con lo que incluso mantenemos opciones para ganar la prueba.".
Ha sido curioso que ha logrado la victoria con dos jóvenes regatistas llegados al equipo en esta etapa: el neozelandés Adam Minoprio (NZL) y el holandés Timo Hagoort, que reemplazó al lesionado Gerd-Jan Poortman.
Sobre ellos ha señalado: "Fue bueno tener a dos jóvenes talentos a bordo, porque hicieron un trabajo fantástico. En una etapa de velocidad como ésta tener tripulantes frescos era importante y su respuesta, respiro, ha sido formidable".
Cuando se le ha preguntado si recordó en esta etapa el hundimiento del 'Movistar' en 2006, ha señalado que: "Eso no me quitó el sueño ni una sola noche. Teníamos un objetivo e intenté que esto no me afectara en la dirección del barco. Creo que era un reto que tenía conmigo mismo y que he superado con una victoria que puede valer más de lo que ahora representa".