Felipe VI ha vuelto a embarcarse este viernes a bordo del Aifos 500 para participar en la penúltima jornada de la 38 edición de la Copa del Rey Mapfre de vela en aguas de la bahía de Palma.
Tras estrenarse ayer, jueves, al timón del barco de la Armada Española, don Felipe ha repetido para disfrutar de una de sus grandes aficiones durante su estancia veraniega en la isla.
El rey se ha desplazado desde el Palacio de Marivent hasta el Real Club Náutico de Palma (RCNP) conduciendo su propio coche, donde le ha recibido el patrón del "Aifos 500", el almirante Jaime Rodríguez Toubes.
Esta vez no han estado la reina Letizia y sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, después de que le acompañaran ayer al comienzo de sus vacaciones.
El rey ha estado durante unos minutos en el interior del náutico y, a continuación, se ha dirigido al pantalán para embarcarse y zarpar hacia alta mar.
A falta de dos jornadas para el final de la Copa del Rey Mapfre, el equipo de Felipe VI está clasificado en octava posición, de un total de catorce barcos, en la categoría Club Swan 50, en la que también compite el "Fram XVIII" que capitanea el rey Harald de Noruega.
El nuevo sistema de puntuación de la Copa va a permitir a los barcos que han obtenido resultados más modestos en la primera parte de la competición seguir teniendo opciones en las dos últimas jornadas al estrecharse las distancias.
Esto beneficia al monocasco que dirige el rey, que nunca ha ganado el torneo de vela de Palma.
La Copa del Rey Mapfre concluirá mañana, sábado, con la entrega de premios que presidirá don Felipe.