Barcelona, 4 nov (EFE).- El Club Náutico Pineda de Mar, uno de los históricos de la vela catalana, ha terminado su actividad después de 29 años de vida a causa de la Ley de Costas, que obliga a los clubes con instalaciones náuticas a tener una superficie máxima de base náutica de 300 metros cuadrados para recibir o renovar concesiones.,El cierre del Club Náutico Pineda de Mar, que contaba con 100 socios, una masa social de 1.500 personas y 10 empleados, se une a los de Cabrera de Mar y Canet de
Barcelona, 4 nov .- El Club Náutico Pineda de Mar, uno de los históricos de la vela catalana, ha terminado su actividad después de 29 años de vida a causa de la Ley de Costas, que obliga a los clubes con instalaciones náuticas a tener una superficie máxima de base náutica de 300 metros cuadrados para recibir o renovar concesiones.
El cierre del Club Náutico Pineda de Mar, que contaba con 100 socios, una masa social de 1.500 personas y 10 empleados, se une a los de Cabrera de Mar y Canet de Mar, también situados en la costa barcelonesa y que fueron los primeros afectados por esta actualización normativa.
Hasta ocho clubes catalanes más se encuentran en la misma situación y esperando recibir una notificación que les obligue a cesar su actividad.
"Es una situación crítica para la vela, tanto a nivel competitivo como lúdico. El Club Náutic Pineda de Mar es el nuevo afectado de una ley que deja de lado a las miles de personas que disfrutan del deporte de la velan en todo el territorio. Nos cierran las puertas del mar a los ciudadanos", declaró el presidente de la Federación Catalana de Vela, Xavier Torres.