El Real Madrid y la Juventus se vuelven a ver las caras en una final de Liga de Campeones, tal y como ocurrió en la temporada 1997-98. Esa cita supuso la séptima Copa de Europa para un club en el que militaba como jugador Fernando Sanz, que vistió la camiseta del primer equipo madridista durante cuatro temporadas, para recalar después en el Málaga, donde puso fin a su carrera deportiva tras siete campañas defendiendo la elástica del club de la Costa del Sol, del que posteriormente fue presidente.
Fernando Sanz atendió a Desmarcados este viernes, en la previa de la cita en Cardiff. Sobre una posible comparación respecto a la Séptima, considera que la situación no es la misma pues, por aquel entonces, "la Juventus llegaba como claro favorito; nosotros llegábamos tras un año horroroso en liga, con ambiente enrarecido". Ese título es, probablemente, "el más recordado, porque se rompía el maleficio". Pese a la cautela lógica en la previa, "cuando el Real Madrid llega a una final lo hace para ganarla; es su grandeza". Además de augurar un partido "muy difícil, de pocos goles", desveló su deseo: "Ojalá que el Mijatovic de esta final sea Isco; lo merece por todo lo que ha pasado". Escucha la entrevista en ElDesmarque Radio.