El torneo femenino de Miami tuvo que esperar hasta la madrugada de este miércoles para ver como la joven tenista australiana Ashleigh Barty lograba el gran sueño de vencer por primera vez a su verdugo la checa Petra Kvitova y se convertía en la segunda semifinalista.
Barty, de 22 años, duodécima clasificada, llegó al partido con marca de 0-4 en sus duelos anteriores ante Kvitova, tercera favorita, pero salió con una victoria por 7-6 (6), 3-6 y 6-2, la primera que lograba y por la que había "soñado".
Nada menos que dos horas y 34 minutos de acción en los que Barty supo encontrar siempre la manera de elevar su nivel de juego cuando más lo necesitaba. Al final, su mejor fondo físico la ayudó al gran triunfo.
No solo le sirvió de venganza deportiva, sino también para alcanzar las semifinales del Abierto de Miami y cumplir su sueño de estar entre las 10 primeras, al margen de lo que haga ya en el próximo partido.
"Era muy importante para mí conseguir la victoria ante una rival como Petra (Kvitova), que tiene un potente saque, lo que me hizo concentrarme al máximo para tener posibilidades de hacer eficaz mi resto, como al final así fue", explicó Barty al concluir el partido, pasada la media noche de Miami.
El partido tuvo que se aplazado dos veces debido a la lluvia, pero las interrupciones no afectaron para nada a Barty, quien aseguró haberse sentido siempre que controlaba el choque, sin perder la concentración ni su buen fondo físico.
Lo volverá a necesitar cuando juegue sus primeras semifinales del Abierto de Miami ante la estonia Anett Kontaveit, vigésima primera favorita, en las que también debutará.
El duelo entre ambas también será el primero que vayan a protagonizar como profesionales.
Kontaveit pasó a semifinales al imponerse por 3-6, 6-2 y 7-5 a la taiwanesa Su-Wei Hsieh, la verdugo de la número uno del mundo, la japonesa Naomi Osaka, a la que eliminó en la segunda ronda.
El triunfo permitió a Kontaviet seguir invicta en los dos duelos que ha mantenido ante Hsieh, quien a pesar de la derrota confirmó que se encuentra en su mejor momento y puede seguir dando muchas sorpresas en la competición sobre superficie de arcilla.
El duelo de Kontaviet frente a Hsieh comenzó de manera favorable a la veterana tenista taiwanesa, de 33 años, quien sorprendió con la variedad de sus golpes a la jugador estonia como lo había hecho ante Osaka y la exnúmero uno del mundo la danesa Caroline Wozniacki, que fueron sus víctimas en las rondas anteriores.
Pero Kontaviet, que en el primer set había cometido 18 errores no forzados, centró su tenis con mejor resto, saque seguro y llegada a las bolas que le colocaba Hsieh para dominar la segunda manga con un parcial de 5-1 y poner al final el empate en el marcador.
Como se esperaba, en el tercero, el duelo fue más igualado después que Hsieh también recuperó sus mejores golpes que le permitieron ponerse con la ventaja parcial de 4-2.
Pero eso fue todo lo que consintió Kontaveit, de 23 años, quien volvió al buen tenis que hizo en la segunda manga y con un mejor fondo físico que le ayudó a mantener peloteos largos se abrió el camino del triunfo después de lograr 44 golpes ganadores.