Una nueva competición de tenis y un nuevo show de Nick Kyrgios. El australiano se impuso este domingo al ruso Daniil Medvedev, tercer cabeza de serie, por 7-6(6) y 7-6(4) en la final del Torneo de Washington (Citi Open), puntuable para el circuito de la ATP, en una hora y 34 minutos de partido.
El mayor número de primeros servicios ganados y de saques directos (18) fueron determinantes para la victoria de Kyrgios, que se adjudicó ambas mangas en la muerte súbita. Precisamente, el punto decisivo lo ganó al repetir el espectáculo con el que había conquistado a todos durante sus dos partidos anteriores.
El tenista, que acostumbra a sorprender por su peculiar comportamiento, decidió acercarse a la grada para preguntarle a una espectadora dónde realizar el saque. Tras charlar con la misma, sacó al lugar que le dijo. ¿El resultado? 'Ace' decisivo y un nuevo título en su poder.
Un Kyrgios exultante lo celebró por todo lo alto. Después de cumplir con el saludo a su rival y al árbitro, se acercó a la grada para dedicarle el triunfo a ese aficionada que tan buen consejo le dio y que le permitió proclamarse campeón. Un tierno abrazo entre ambos puso el final feliz a esta bonita y curiosa historia.
Al igual que en sus dos partidos anteriores, Nick Kyrgios 🇦🇺 le consultó a un espectador donde sacar y luego terminó ganando el punto, que en esta ocasión le dio el título del ATP 500 de #Washington al vencer a Daniil Medvedev 🇷🇺 por 7-6(8) y 7-6(4). pic.twitter.com/q0B7xJ5AqA
— Respiro Tenis (@Respiro_Tenis) August 4, 2019
Nick Kyrgios también mostró su peor cara en el Torneo de Washington. Durante el partido de octavos de final contra el japonés Nishioka, en el que se impuso por 6-2 y 7-5, volvió a mostrar su mal carácter.
En un descanso, lanzó con violencia una botella de agua contra la silla del árbitro. Luego intentó excusarse diciendo que había sido sin querer: “Estaba intentando beber y s eme ha resbalado”. Las imágenes no parecen dejar lugar a dudas de lo que ocurrió.