Kyrgios sobrepasa los límites: rompe dos raquetas y termina a voces y escupiendo al juez de silla

Nick Kyrgios va de show en show, aunque lo que ocurrió esta madrugada en el Masters 1000 de Cincinnati sobrepasa cualquier límite y barrera. El tenista australiano volvió a sacar a relucir su peor cara, después de haber tenido una bastante más amable hace unas semanas cuando ganó el Citi Open.

En una intensa batalla de dos horas y 17 minutos, Karen Khachanov venció 6-7 (3), 7-6 (4) y 6-2 al polémico Kyrgios y avanzó a los octavos de final mientras aguantó el espectáculo de su rival, que escupió al juez de silla, recibió dos warning, rompió dos raquetas y terminó discutiendo.

La desesperación de Nick Kyrgios fue cada vez a más durante el duelo ante el tenista ruso y el peor momento del partido llegó cuando le pidió al juez de silla ir baño. El australiano cogió dos raquetas y se metió en los vestuarios. Hasta ahí todo normal. El caso es que nunca llegó a ir al baño, sino que se quedó en el pasillo y estrelló las dos raquetas que llevaba contra el suelo, quedando estas completamente destrozadas ante la atónita mirada de los presentes.

Ahí no terminó el show del tenista australiano, que tampoco tuvo muy buen perder. Como se puede ver en el vídeo inferior, se marchó gritando palabras no muy bonitas y le negó el saludo al juez de silla mientras lanzó un escupitajo.

Además, en otro momento del encuentro, Nick Kyrgios le puso a la cámara una toalla encima mientras se acercaba a grabar cómo era atendido de un problema físico. En definitiva, mostró un comportamiento nada ejemplar y que poco tiene que ver con los valores del tenis.