Las derrotas siempre duelen, pero quizá esta más. Carlos Alcaraz rompió a llorar tras perder la final contra Novak Djokovic en Cincinnati. Una imagen que hasta ahora no habíamos visto de él. Sentando en el banco y con la mirada baja, el español no pudo aguantar las lágrimas. El número uno, que no ha perdido esta posición a pesar de la derrota, se emocionó al terminar el partido. La toalla no solo secó el sudor, sino también sus lágrimas. Un llanto que debería ser de orgullo y no de tristeza. Pero quizá Alcaraz sacó a la luz toda la tensión acumulada de toda la semana.
"Hay derrotas y derrotas, hay derrotas que cuesta mucho asimilarlas, otras que cuestan menos. Este tipo de derrotas duelen, duelen mucho, no voy a mentir. Pero al mismo tiempo te quedas con una sensación positiva de decir que lo has dejado todo, cuando uno siente que lo ha dejado todo en la pista no se puede reprochar nada, tienes que salir orgulloso y contento de lo que has hecho, y ese es mi caso", dijo Alcaraz en conversación con EFE al acabar la final.
Estas lágrimas nos duelen.
Estas lágrimas deben ser de orgullo.Gracias por hacernos disfrutar, Carlos Alcaraz. #LaPistaDelTenis pic.twitter.com/uVHgJ8PO0r
— Movistar Plus+ (@MovistarPlus) August 21, 2023
El serbio conquistó este domingo su tercer Masters 1000 en Cincinnati. Y se dice pronto, pero también su título número 95. Un partido donde el reloj se paró a las tres horas y 49 minutos. Una auténtica batalla sobre la pista central de Cincinnati. Una oda al tenis entre estos dos jugadores. Los dos mejores del mundo. Y es que Novak se tomó la revancha de Wimbledon para acabar con el sueño de Alcaraz de poder levantar su primer título en este Masters 1000. Puntos largos, de esos que al bueno de Novak le recuerdan a Rafa Nadal, y que necesitó de dos tie break para poder derrotar a Alcaraz. Tras un resultado de 5/7, 7/6 y 7/6 conquistó Djokovic el torneo anterior al US Open.
El último Grand Slam de la temporada está a la vuelta de la esquina. Carlos Alcaraz es el principal favorito para llevarse el título. No solo porque es el actual campeón, sino porque llega como número uno. Veremos si se repite otra final más. Porque ahora es la final soñada por todo el mundo.