En una edición de Roland Garros cargada de emoción y nombres propios, no solo Carlos Alcaraz ha dado de qué hablar. Este sábado, el tenis español ha vuelto a tocar la gloria en la modalidad de dobles gracias a la victoria de Marcel Granollers y Horacio Zeballos. La pareja hispano-argentina logró imponerse a los británicos Joe Salisbury y Neal Skupski en un duelo lleno de tensión, remontadas y momentos de alto nivel.
La Philippe Chatrier, cerrada por la lluvia, fue testigo de una final trepidante. Granollers y Zeballos comenzaron dominando con un primer set impecable que terminó con un inusual 6-0. Los británicos lograron reaccionar en el segundo set, que se resolvió en un igualado tie break (7-5). Ya en el tercero, los campeones supieron mantener la calma incluso cuando Skupski y Salisbury rompieron el servicio nada más empezar. La experiencia y compenetración de la dupla hispano-argentina acabaron decantando la balanza por 7-5, en un desenlace vibrante.
A sus 39 años, Marcel Granollers consigue así el primer Grand Slam de su carrera después de cinco intentos fallidos en finales anteriores. El tenista barcelonés se une a leyendas del tenis español como Manolo Santana, Emilio Sánchez Vicario o los hermanos López, todos ellos campeones de dobles en Roland Garros. Con 30 títulos ATP en su haber y triunfos en todos los niveles ATP 250, 500, Masters 1000, ATP Finals y Copa Davis, a Granollers solo le faltaba una pieza: un major. París le ha dado esa última joya.
Tras escalar hasta la tercera plaza de la Race 2025, Granollers y Zeballos se tomarán un merecido descanso antes de preparar Wimbledon. Sorprendentemente, no disputarán ningún torneo sobre hierba antes del major británico, al que llegarán con el objetivo de romper su maldición en “la catedral” y aprovechar la inercia ganadora. Su mejor resultado allí, las finales, les deja con la espina clavada de conseguir un doblete histórico.