Riot Games comienza a dar algunas pinceladas sobre la estructura competitiva de las futuras ligas regionales que arrancarán en 2018 junto a la LCS EU. Con la desaparición de la Challenger Series, la desarrolladora de League of Legends pretende dar más relevancia a las competiciones nacionales. Esto cambiará significativamente el panorama de muchas de ellas, especialmente en el caso de la Superliga Orange.
Las ligas regionales europeas (ERL) que se encontrarán a partir de ahora bajo un vínculo más firme con Riot Games son estas:
Estos son los países que conformarán las ERL iniciales, pero Riot Games pretende que más naciones europeas entren a formar parte de esta compendio de ligas de cara al futuro. Cabe destacar que estas competiciones no tienen necesariamente que mantener la misma estructura. Riot no obliga a seguir un formato concreto, sino que puede tratarse de una competición regular como la Superliga Orange o de un circuito de torneos, por ejemplo.
Riot, por lo tanto, apoyará de una forma más directa a estas ligas. "Europa es una gran región con jugadores con muchísimo talento y su éxito en la escena internacional es una prueba de ello. Cada año vemos nuevas caras en la escena apuntando buenas maneras, pero todavía se puede hacer más para apoyar el desarrollo del talento por medio de las diferentes competiciones locales que existen en el ecosistema", comunican desde la web Lolesports.
Las ligas regionales contarán con un calendario unificado y se jugarán de forma paralela a la LCS: de enero a marzo (Spring Split) y de junio a septiembre (Summer Split). Durante los meses de abril y septiembre se disputará la Copa de Europa entre los mejores de cada competición, y durará entre dos y tres semanas. Este torneo adquirirá una importancia vital, puesto que, además de suponer un acercamiento a formatos como el de la Champions League de fútbol, podría tratarse del puente hacia la LCS EU.
De cara a la primera Copa de Europa, que se disputará al finalizar el split de primavera, los equipos participantes no solo serán los ganadores de las respectivas ligas regionales en dicho split, sino también aquellos equipos que contaban con plaza en la Challenger Series (Mysterious Monkeys, NiP, Red Bulls y Wind and Rain) o para el Clasificatorio a la misma (Origen y The G-Lab Penguins, por ejemplo).
No obstante, hay que tener en cuenta que entre la temporada de primavera y la de verano se ha eliminado el descenso para los equipos de la máxima competición. Riot no ha concretado todavía qué habrá en juego más allá de un premio en metálico, pero ha asegurado que se ofrecerá más información relativa a la Copa de Europa a mediados del Spring Split. Los equipos de aquellos países sin liga local podrán intentar acceder a este torneo mediante un clasificatorio abierto.
Todo esto, en definitiva, cambia completamente el panorama competitivo en España. A partir de ahora, la Superliga Orange se jugará siguiendo el calendario establecido por Riot, por lo que Gamergy (celebrada en junio y diciembre), salvo que modifique sus fechas, dejará de coincidir con las finales de la competición. LVP deberá, pues, ofrecer más información sobre sus planes para reestructurar la liga nacional después de todas estas novedades.