Dispara Google y responde Apple Arcade, como para no soñar en el cambio. En pocos días dos de las mayores empresas del mundo han presentado un plan mastodóntico para plantarle cara a los grandes de la industria con el ejemplo de Netflix y su éxito como plataforma de streaming, una idea que va a suponer una revolución con una sola consecuencia, el beneficio del gamer.
Si te preguntas qué hacías con el móvil hace diez años, si es que lo tenías, quizás nunca podías llegar a imaginar que la industria del videojuego podría romper el mercado de la manera más igualitaria posible. Ese trasto que antaño se usaba para jugar ahora es una de las consolas más poderosas del mundo y Apple quiere explotarlo recorriendo el camino de la exclusividad.
Con las miras puestas en otoño de 2019 y más de 100 exclusivos, el gamer que no se puede permitir una consola pero sí un iPhone de última generación es el foco con el que Apple tira la casa por la ventana con Hironobu Sakaguchi, Will Wright y Ken Wong, tres nombres ilusionantes para empezar a soñar.
Porque sí, esa etapa en la que te tumbas en el sofá a discutir qué serie o película vas a ver de las 48786 de las que dispones va a terminar pasándote con el móvil, ahora o 5 años, con Apple o con Stadia, pero con muchas más opciones que amplifican las oportunidades y sobre todo el discurso.
Apple Arcade tiene claro que los billetes son el inicio de un proyecto que debe dominar la próxima década en el móvil y de ahí la fuerte apuesta por nombres conocidos, algo que Stadia multiplicará para competir con Sony, Nintendo y Xbox a medio plazo.
La muerte de la consola es un sintagma nominal tan precipitado como imposible de predecir, no solo por los grandes títulos que las tres grandes compañías se guardan para la nueva generación, sino por las oportunidades que puedan dar una vez la competencia con estos servicios bajo demanda sea real, en móvil, pc o en la proyección holográfica que proyectes desde el cuarto de baño con el móvil, a saber cómo acabará esto.
Lo que está claro es que Apple Arcade es un bocado directo a la tarta que ahora mismo más gente quiere, Fortnite y PUBG lo han demostrado con su salto a la plataforma, pero el éxito algo antes de títulos como Clash Royale son el ejemplo perfecto del crecimiento que todavía tiene por delante la industria.
https://www.youtube.com/watch?v=67umVefSXnY
El móvil ya no es aquel ratito que pasabas entretenido con la serpiente. Creadores de sagas como Los Sims o Final Fantasy son las primeras espadas de Apple Arcade, un acierto absoluto para reforzar la idea que quieres tener, desmarcarte con un modelo de calidad que plantee nuevos horizontes.
Los juegos exclusivos en su gran mayoría solo podrán jugarse en las plataformas de iOS y precisamente esa es la seña de identidad, juegos offline y sin rastreo, un plus que da fiabilidad para la apuesta.
En la unión de marcas y la presentación de los primeros títulos aparecen los siguientes nombres: Little Orpheus, Sumo Digital/The Chinese Room; The Artful Escape, Annapurna Interactive/Beethoven & Dinosaur; The Pathless, Annapurna Interactive/Giant Squid; ATONE: Heart of the Elder Tree, Wildboy Studios; LEGO Brawls, LEGO/RED Games; Oceanhorn 2: Knights of the Lost Realm, Cornfox & Bros.; Sonic Racing, SEGA/HARDlight Studios; Box Project, AQUIRIS; Frogger in Toy Town, Konami; Projection: First Light, Blowfish Studios/Shadowplay Studios; Mr. Turtle, Illusion Labs; FANTASIAN, Mistwalker Corporation; Sayonara Wild Hearts, Annapurna Interactive/Simogo y Hot Lava, Klei Entertainment.
Antes buscábamos la parrilla televisiva para saber qué ver, ahora nos peleamos al elegir una de las millones de series de Netflix, HBO, Hulu o Amazon y mañana tendremos que pensarnos si jugar a un juego de Apple o de Google, de dónde jugarlo y de si nos merece la pena seguir gastando tanto en una variedad que a la larga ni terminaremos probando. Porque sí, el jugador sale ganando con tanta variedad, pero que no se nos olvide disfrutar de los juegos en vez de probar 14 sin llegar a saborear uno siquiera como el creador hubiese querido.