Tras el estrepitoso fracaso que supuso Artifact, Valve no piensa rendirse con el que en su día fuese su esperado título de cartas. Cierto es que con el tiempo no funcionó en absoluto, lo que les llevó a pausar su desarrollo hace ahora justo un año, pero planean volver por todo lo alto, anunciándose la beta 2.0 de Artifact.
De este modo la compañía pretende resucitar otro de los grandes títulos del profesor Richard Garfield, creador de Magic The Gathering, que precisamente saliese de Valve hace un año, poniendo en marcha una serie de cambios significativos en la jugabilidad que sean capaces de atraer al público en lugar de alejarlos. De los errores se aprende, y en base a ello esperan dar con la clave que no les lleve de nuevo a perder oleadas ingentes de jugadores hasta llegar a menos de 1.000 jugadores concurrentes al día.
El juego de cartas inspirado en Dota 2 supuso una gran expectación en su momento, aunque muchos usuarios achacaban que quizá fuese demasiado confuso. Y ahora, en plena competencia de Legends of Runeterra o el superviviente Hearthstone, anuncian esta beta 2.0 y los cambios que planean ejecutar en el juego.
Por el momento todo son tentativas, pero el mayor cambio es un mayor acceso a las tres sendas a la vez. Muchos de los efectos se mantienen, pero se abre el campo a que las cartas puedan ser jugadas y no tan excluidas. Lo que se suma a la nueva opción de selección de héroe de cara a la construcción de mazos.
El hacerlo más accesible para todos también influye en su economía, pues Artifact ya no venderá cartas, ni individuales ni en packs, evitando así enfrentarnos a rivales demasiados poderosos que hayan tirado de tarjeta.
En breve será abierta esta beta 2.0, una vez hayan sido probadas las primeras e importantes cuestiones. Tras ello, harán llegar las invitaciones a la misma con una significativa ventaja a aquellos que ya tuvieran comprado el juego previo a este nuevo anuncio. Y construir entre todos lo que debe ser el renovado Artifact.