Wadid y su recuerdo a G2 en plena lucha por el no descenso de Griffin

Son días duros para Griffin, que tras una temporada para olvidar, comenzando por un convulso mercado de fichajes e infinitas polémicas, ahora se juegan el no descender de categoría. Un momento crucial que les ha llevado a fichar a Wadid, quien se ha acordado de G2 Esports en cada jugada favorable de su equipo del intenso duelo contra el equipo de challenger Seorabeol Gaming.

Un extraño destino para una organización que hace pocos meses hacía soñar a Corea. Un equipo repleto de rookies que irrumpieron en la categoría para proclamarse subcampeón tres veces seguidas, convirtiéndose en uno de los representantes de los últimos Worlds 2019. Pero más allá de la acción y la tensión de estas últimas relegations de la historia de LCK, Wadid ha sido protagonista con un gesto que ha emocionado al conjunto samurái.

Aunque polémico fue su fichaje con G2 procedente de ROCCAT, en muy poco tiempo tanto él como Hjarnan demostraron estar muy a la altura del reto que tenían por delante. Y aunque coincidieron con un Fnatic imparable en Europa, hizo soñar a la región llegando también a las semifinales de Worlds 2018, tumbando al intratable RNG de Uzi que se antojaba como uno de los grandes favoritos de ese año.

Europa y G2 guardan muy buenos recuerdos de Wadid, y está claro que es un sentimiento recíproco por parte del support surcoreano. Un cariño muy especial del que ha querido presumir sacando la chapa samurái en algunas de las jugadas más importantes del encuentro, como la primera sangre conseguida tras una buena rotación con Nautilus, el ACE decisivo para el 1-0 y la posterior y pertinente caída del nexo enemigo.

Aunque quizá sea lo único positivo a rescatar de la serie para Griffin, que tras conseguir el 1-0 vio como Seorabeol Gaming conseguía el empate, para más tarde y tras un par de pausas, lograr el 1-2 final en una intensa partida. Con ello el equipo de Wadid se medirá a SANDBOX, y al menos uno de ellos deberá decirle adiós a la LCK.