En Riot Games ya no saben lo que hacer para acercarnos a los fighting games mediante el propio League of Legends y el último ejemplo se vio en la LCK, una pelea de titanes en la toplane del pasado 19 de junio convertido en un producto de lujo, una especie de adaptación a lo que podría ser una prueba de Proyect L adaptada al MOBA, una auténtica barbaridad.
Ni esos serán los gráficos, ni los ataques exactos ni querían que así fuera, pero la única respuesta del usuario después de ver esta batalla entre el Mordekaiser de Summit y el Wukong de Nuguri es de doble lectura, pensar en la LCK como una proyección audiovisual acojonante y volver a imaginar cómo será ese Proyect L del que poco sabemos hoy día.
"The top lane is a sacred colosseum"
An extended 1v1 between Nuguri and Summit -- And "the Raccoon" comes out on top! #LCK pic.twitter.com/oahPudRXPA
— Ashley Kang 애슐리강 (@AshleyKang) June 19, 2020