Nuestra aventura por Star Wars Outlaws la podemos afrontar de varias maneras diferentes. Y aunque no siempre sea lo más óptimo, habrá momentos en los que tirar de blaster sea la única alternativa para resolver un conclifcto. Ésta será nuestro arma principal durante buena parte del juego, y cuidar y mejorar el blaster es igual de importante que el aprender las mejores tácticas de sigilo.
Porque al final, el título de LucasFilm Games es un grandioso juego de infiltración donde el sigilo es una parte clave y fundamental. Solo así podremos resolver la mayoría de las misiones de la mejor manera. Dedicándole más tiempo, sí, pero hay momentos en los que será imposible salir del lío en el que nos hemos metido. Un sigilo que también será clave para llevarnos bien con la mayoría de sindicatos de la red criminal.
Una vez abandonamos Canto Bright, llegamos al planeta Toshara. Al llegar aquí y tras el aparatoso aterrizaje, empezará nuestra aventura de verdad, encontrando todo tipo de materiales y piezas. Una vez con las piezas idóneas en el inventario, podremos mejorar el blaster, pero no de inmediato, deberemos cumplir un requisito previo fundamental.
En esta mesa de trabajo podremos tanto mejorar como modificar nuestro blaster. Éste tiene varios tipos de disparo diferentes, como el de Plasma, centrado en hacer daño, y el de Iones, centrado en aturdir y desactivar escudos. Pero tanto uno como otro pueden ver modificado su estilo, y mejorado su precisión, el enfriamiento, y por supuesto el daño.
Nosotros seremos los que decidamos qué arma preferimos. Una más lenta y letal, o una más rápida que centre su daño en intentar un mayor número de impactos. Pero antes de ello, el menú nos insta a que encontremos dicha mesa de trabajo. ¿Pero qué es y dónde está la Cazaestelas?
Pues bien, aquí la memoria puede que nos juegue una mala pasada, o que directamente no hayamos prestado atención a ese dato, ya que la Cazaestelas no es más que la nave que acabamos de robar, y que un tal Waka nos está ayudando a reparar. De modo que si queremos ponernos a realizar misiones secundarias, algunas de ellas de alto riesgo, quizá sea mejor mejorar primero nuestro blaster. Para ello, tendremos que avanzar en la historia hasta que reparen la nave, y aunque no tenemos por qué salir del planeta, al entrar en ella por la rampa principal a la izquierda, o bien por la entrada lateral directamente, habremos encontrado la mesa de trabajo de la Cazaestelas.
Aquí, con los materiales encontrados previamente, podremos ir mejorando nuestro arma. Y a medida que avanza la aventura en Star Wars Outlaws y consigamos más materiales, podremos volver para seguir mejorándola. Algo fundamental para ir teniendo cada vez mayores opciones para cuando no queda más remedio que ser agresivo, así como ir aumentando nuestra potencia de fuego. Pues habrá momentos y misiones que, sin estas mejoras, no serán posibles de completar.