Todo sobre la PS5 Pro, de los 800 euros a las mejoras y su lanzamiento

Sony abre el mercado de la actual generación de consolas con la presentación de la PS5 Pro a 799 euros. Ese impacto principal tras cuatro años de PlayStation 5 deja tres grandes mejoras centradas en el GPU, raytracing y la resolución. Con fecha confirmada para noviembre y una prueba con gameplay en multitud de juegos, la decisión ahora está en el jugador.

PS5 Pro apuntala su futuro como una puerta de entrada a una generación prometida años atrás. El 4K a 60 fps es un sueño fracasado que ahora vuelve de la mano de una consola intermedia llamada a dominar el próximo lustro. Mejora de rendimiento de GPU, el doble de potencia que PS5, una potenciación del raytracing y un reescalado mejorado en el PSSR.

Los precios de la PS5 Pro en sus dos versiones

El primer impacto de la PS5 Pro está en su lanzamiento en apenas dos meses, pues llega al mercado con una única versión. Sin disco ni soporte vertical, la consola cuesta 799 euros de lanzamiento con fecha cerrada para el 7 de noviembre. La versión con soporte físico es de 920 euros más 30 del soporte físico.

Las especificaciones de la PS5 Pro

Mejor GPU. Las capacidades de la nueva PS5 Pro mejoran un 28% la velocidad memoria RAM junto a la mejora de las unidades de los componentes. Eso logra una rapidez de renderizado de un 45% mayor en comparación a la consola original. Potencia de la mejora gráfica y de los efectos visuales, con una demostración gráfica en Horizon Forbidden West.

La promesa del Ray Tracing avanzado habla de mejoras que hasta duplican o triplican la velocidad de la PS5 Pro. El tercer eje es el hardware centrado en el reescalado mediante inteligencia artificial para mejorar la resolución, ya que analiza las imágenes pixel a pixel y mejora el PSSR.

El gameplay de The Last of Us 2 en PS5 Pro

Sony afirma que es capaz de duplicar el frame rate y muestra como ejemplo un gameplay de The Last of Us 2 con una mejora palpable. La promesa de los 60fps vuelve a escena, y la muestra son más juegos propios como Spider-Man 2 o Ratchet & Clank: Rift Apart. Y aunque no hay juegos nuevos, la realidad es que esta generación ya necesitaba un salto como este.

Otra de las mejoras prometidas en la jugabilidad es la comparativa en el modo rendimiento, donde también hay una línea clara de mejora. Sobre todo en el detalle, en este caso con ejemplos claros en Metal Gear y Ratchet & Clank. La resolución de la escena en el fondo con los árboles o los coches a lo lejos de Spider-Man 2 deja bastante clara la mejora.

Las especificaciones obligan a un salto económico que pasa a los 800 euros para una consola ya existente. Es mucho, pero lo cierto es que si cumple, ofrece algo que necesitan muchos juegos actuales. Esos 60fps a 4K no son una realidad en la PS5 por mucho que así fuera su propuesta inicial. Y la pregunta no pasa por el 2025 con GTA VI, sino por los próximos cuatro años sin estas capacidades en una PS5 normal.