Míchel celebra su aniversario presentando la candidatura del Rayo al ascenso
David RamiroMadrid, 25 feb .- La última victoria, goleando al líder, el Huesca, ha permitido al Rayo afianzarse en la segunda plaza, recortar puntos con el primer clasificado y presentar su candidatura definitiva al ascenso a Primera dirigido por Míchel, que cumple un año al frente del banquillo como entrenador.
Transcurridas justo dos terceras partes del campeonato, el Rayo llega a este tramo final de curso en una posición privilegiada. Es segundo clasificado, está a cinco puntos del líder y su confianza, según pasan las jornadas, va en aumento.
Aún así, la prudencia es lo que marca el día a día del equipo. Se encarga de recordarlo en cuanto tiene ocasión su técnico, Míchel, que no quiere euforias y sabe que el fútbol puede ser muy cambiante de una semana a otra. En el Rayo, desde su etapa como jugador, ha vivido de todo.
"Podemos ser mejor equipo todavía. Podemos tener más posesión, hacer más ocasiones de peligro, y se trata de, con los recursos que tenemos, hacer más cosas. Esa diferencia de goles que tenemos, el más diecisiete, es una cifra bastante buena. Si mantenemos eso el equipo estará en lo más alto", dijo Míchel, en su última rueda de prensa.
El madrileño dirigió su primer partido como entrenador del Rayo el 25 de febrero de 2017. Lo hizo en un derbi frente al Getafe y en una situación bien distinta a la actual. Por el banquillo ya habían desfilado dos entrenadores -José Ramón Sandoval y Rubén Baraja- y el equipo estaba peleando por no descender a Segunda B.
El perfil de Míchel, conciliador, trabajador y buen conocedor de la casa, llevó al Rayo a la salvación y después a un periodo de reflexión antes de afrontar esta temporada que es crucial para el futuro del club.
Desde el principio el objetivo ha sido el ascenso y para ello se hizo un esfuerzo para que volvieran al club jugadores importantes como los argentinos Oscar Trejo y 'Chori' Domínguez y Míchel apostó definitivamente por jugadores jóvenes que transmitieran hambre de éxitos y aire fresco como Santi Comesaña, Fran Beltrán, Unai López o Raúl de Tomás, que ya lleva catorce goles marcados.
Por este camino de transición silenciosa se ha quedado Roberto Trashorras, el veterano capitán que lideró al Rayo en sus mejores años en Primera con Paco Jémez y que con Míchel fue perdiendo protagonismo hasta el punto de pasarse varios meses sin convocar por decisión técnica hasta su salida del club en el último día del pasado mercado de invierno.
A poco más de tres meses para que acabe la Liga, el Rayo mira al futuro con optimismo pero sabiendo que en este último tramo de campeonato es donde se decidirá todo y los tropiezos se pagan.
"Quedan catorce finales, ocho son fuera y seis en casa, y hay que remar mucho para estar arriba", confiesa Míchel.
Gran parte de las opciones de ascenso del Rayo pasarán por Vallecas, dónde recibirán al Reus, Cádiz, Zaragoza, Tenerife, Córdoba y Lugo. Por contra, tendrá que salir fuera para jugar con el Valladolid, Almería, Sporting, Albacete, Barcelona B, Granada, Alcorcón y Nàstic.