El clásico en diez claves

Roberto Morales

Madrid, 26 feb .- El clásico del fútbol español decide una plaza en la final de la Copa del Rey en el Santiago Bernabéu, en un partido con numerosos factores que lo decidirán y que se resumen en diez claves: de la inspiración del genio Leo Messi al mundo de Gareth Bale pasando por el duelo veloz de Vinicius ante Semedo.

1. La inspiración del genio Messi

Clavadas en la memoria reciente del madridismo están exhibiciones de fútbol de Leo Messi y una imagen icónica, quitándose la camiseta y mostrándola a la grada. El argentino es el gran dominador del clásico y el Santiago Bernabéu es su estadio preferido, donde más jugó lejos del Camp Nou y ganó, en diez de los 19 partidos. Hasta quince goles que le convierten en la gran amenaza, el jugador temido y al que frenar en un sistema de ayudas defensivas. Llega al clásico de marcar un triplete en el Sánchez Pizjuán para levantar al líder y acercarle con su remontada un paso más al título, confirmando su recuperación total del golpe que le impidió jugar de inicio la ida.

2. Vinicius-Semedo, duelo veloz

Protagonizaron en el Camp Nou un bonito duelo, un pulso de velocidad en carreras, con los dos brillando y siendo claves en sus equipos. A Vinicius no se le hizo grande el Camp Nou en su primer clásico. Juega en cualquier estadio como si estuviese en el parque de su barrio. Con su descaro habitual solo le faltó lo que le falta en gran parte de sus partidos, acierto en los últimos metros. Lo buscará en el Bernabéu, vigilado de cerca por Semedo que será su sombra.

3. Keylor y un examen a la falta de continuidad

Fue clave en el Camp Nou con dos paradas brillantes. El mérito de un portero que ha quedado relegado para la Copa del Rey, sin minutos ni continuidad, obligado a brillar tras 20 días sin un partido en un examen mayor. Nunca perdió en Barcelona con el Real Madrid. Es su momento para no hacerlo en el Bernabéu y aspirar así a tener, al menos, un partido más en lo que resta de temporada con la final de Copa del Rey. Su año más duro, con solo trece partidos disputados, seis en el torneo del k.o. de los últimos siete y uno liguero por lesión de Thibaut Courtois. El portero de las tres Copas de Europa quiere dejar una nueva reivindicación.

4. El mundo de Bale

Es impredecible. Tendrá minutos seguro, bien sea de inicio si Santiago Solari hace la vista gorda a lo ocurrido en el Ciutat de València, donde dejó de calentar por voluntad propia y rechazó la felicitación de compañeros tras su gol, o en el transcurso de un clásico en el que debería ejercer el liderazgo que se esperaba de él a inicios de temporada. La respuesta del madridismo a su comportamiento será punto de atención. Si juega recibirá el trato especial que demanda, otros como Isco no tuvieron la misma respuesta a una indisciplina, y será una oportunidad de volver a ganarse el sitio perdido en el equipo titular.

5. Lucha de gigantes en la medular

Es la zona del campo donde un gran partido comienza a decantarse. De la lucha de los centrocampistas, el pulso por tener la posesión, adueñarse del tempo del partido. Casemiro, Toni Kroos y Luka Modric ante Sergio Busquets, Sergi Roberto e Ivan Rakitic. Los indiscutibles del Real Madrid ante un Barcelona que espera no añorar la figura de Arthur poniendo brillantez en la construcción. Jugadores especializados en sus demarcaciones. Los encargados del equilibrio y hacer jugar al resto. Lucha de gigantes entre los mejores del mundo.

6. Las quejas del calendario madridistas

El físico puede marcar un duelo de tan alta intensidad y el Real Madrid llegará con 28 horas menos de descanso que su rival. El Barcelona jugó en el primer turno de tarde del sábado y la queja de Santiago Solari llegó por jugar en Valencia ante el Levante en el último turno del domingo. Un trato desigual que fue denunciado desde el club blanco, que pudo pesar en el intento de ahorro de energías frente al Levante y que seguro olvidarán sus jugadores cuando el balón comience a rodar. Solo en caso de perder se recurrirá a él.

7. Pulso de 9, irregular Suárez ante el mejor Benzema

En Sevilla puso fin a una sequía de cinco partidos sin marcar Luis Suárez, con aluvión de crítica de por medio por su larga racha sin hacerlo lejos del Camp Nou en Liga de Campeones. Es una amenaza constante y dejará un nuevo duelo con Sergio Ramos del que saltan chispas. En la otra punta del campo estará el mejor Karim Benzema, regular en el gol al fin, liberado sin Cristiano Ronaldo y más egoísta en los últimos metros para protagonizar la mejor temporada goleadora que se le recuerda cuando pocos ya tenían fe en él. Son dos nueves de características distintas pero igual de claves para sus equipos.

8. Ser visitante, punto a favor

En gran parte de los últimos clásicos jugar de local no fue un punto a favor. Solo en dos de los últimos diez, Real Madrid o Barcelona ganaron ante su afición. Sus jugadores están acostumbrados a jugar en los climas más hostiles, nada les intimida. Lejos de eso les suele motivar aún más. El Santiago Bernabéu se llenará para intentar ser el jugador número 12 desde la grada con el aliento del madridismo a un equipo que lo necesita para acceder a la final de Copa antes de encarar otro clásico que puede terminar de enterrar sus reducidas opciones ligueras.

9. Ramos y Piqué, jefes de leyenda

Son los referentes defensivos de sus equipos y con sus espaldas cargadas de clásicos con mil anécdotas. Sergio Ramos se situará a un solo clásico de igualar a los tres jugadores que más disputaron, 42, Paco Gento, Xavi Hernández y Manolo Sanchís. El capitán blanco es el gran líder del equipo. Vuelve fresco tras descansar por sanción. Piqué se extramotiva en casa del eterno enemigo en partidos siempre especiales para un deportista que saborea la rivalidad. Estuvo inconmensurable en el Camp Nou para frenar los mejores minutos del Real Madrid, firmando una gran campaña ya centrado únicamente en el Barcelona tras dejar la selección española.

10. Marcelo y Coutinho, los señalados

Son dos jugadores que se perfilan suplentes y señalados indirectamente por su bajo momento por Solari y Valverde. Marcelo lo pasó mal en el Camp Nou y cada partido que juega acaba provocando goles por su carril. Los rivales le buscan porque no está en buen estado físico y le está costando recuperarle. Ha perdido el puesto con Reguilón y jugará de inicio uno de los dos clásicos para optar a recuperarlo. Coutinho dejará su sitio a la verticalidad de Dembélé y su peligro al contragolpe. No alcanza el nivel que se espera de él pese a las continuas oportunidades de las que dispone. El Bernabéu es el mejor escenario para el golpe en la mesa que desea.