Los planes de Florentino Pérez con Kovacic y James Rodríguez

El Real Madrid trabaja ya en lo que será la temporada 2019/20. El conjunto blanco, ya con Zidane a los mandos del vestuario sigue el plan trazado por la dirección deportiva y ya ha asegurado este jueves la llegada de Eder Militao. En el plano de salidas, el club merengue tiene prácticamente decidido -más aún desde la vuelta de Zizou- que no va a contar con James Rodríguez.

El futbolista colombiano se encuentra cedido en el Bayern de Múnich desde el verano de 2017 y el club alemán deberá de decidir si quiere continuar contando con él antes del 15 de junio. En caso de que tomen la determinación de ejecutar la opción de compra que tienen sobre él, deberán abonar 42 millones de euros al Real Madrid. Rummenigge, director general del cuadro teutón, ya ha manifestado que tienen la intención de firmarlo, pero aún no se han lanzado a hacer efectiva la opción de compra. 

En caso de que el equipo bávaro no llegue a quedarse con el jugador en propiedad, corresponderá al Real Madrid la gestión de un futbolista que no cuenta para Zidane. En ese caso, según informa El Confidencial, el club blanco pondrá al jugador en el mercado a un precio de 60 millones de euros no bajando en ningún caso de los 50. 

En un caso parecido queda Mateo Kovacic. El Chelsea, club en el que milita esta temporada como cedido, no tiene opción de compra y además se encuentra en una situación delicada debido a la sanción que le ha impuesto la FIFA y que le impedirá inscribir nuevos futbolistas en los próximos mercados de fichajes. El centrocampista ha sido subcampeón del mundo con su selección y campeón de la Champions con el Real Madrid en tres ocasiones. De este modo, y debido a la mala relación que existe entre el jugador y Zidane, el conjunto blanco también pretende recaudar 50 millones de euros de su venta.

Este es el plan que tiene Florentino Pérez con los dos futbolistas  que tiene cedidos más 'apetecibles' con el objetivo de recaudar alrededor de 100 millones de euros para reconstruir un equipo que vuelva a luchar por todas las competiciones hasta el final.