De Segunda a la historia

Además de otras consideraciones Weligton puede apoyar su brillante carrera en unos números y unos hitos que le sitúan en el cuadro de honor de los jugadores del Málaga Club de Fútbol. De Segunda División a Primera, con la guinda de la Champions League, en la que fue pieza clave. De hecho, siempre fue pieza clave para todos los entrenadores que pasaron por el Málaga: Muñiz, Tapia, Jesualdo, Pellegrini, Schuster, Gracia... 

Weligton jugó 38 partidos en Segunda, 37 completos. Desde entonces, no se bajó del carro de la élite ni del Málaga. Pero entonces no se sabía hasta qué punto era buen futbolista para la máxima categoría. La exigencia de una competición como LaLiga Santander le hizo crecer a pasos agigantados a pesar de no ser un niño. Fue prácticamente el primero en 'combatir' con Diego Costa. Retó a Messi hasta convertirse en uno de los grandes archienemigos del mejor jugador del mundo. Fue un rival durísimo pero un compañero fiel. Y un auténtico guía para los jóvenes que iban llegando al equipo, especialmente los canteranos.
Cada verano llegaban centrales al Málaga que le iban a mandar al banquillo. Tenía que estar muerto para que eso ocurriese. Ni siquiera en la mejor etapa de la historia del club, cuando todos apuntaban a la prestigiosa dupla Demichelis-Mathijsen. Hasta llegó a jugar de central diestro con el holandés en el curso donde se logró la clasificación para la Champions League.
Y fue en la competición europea donde terminó de consagrarse como el mejor central de la historia del Málaga. Partidos inolvidables, sobre todo en La Rosaleda consiguiendo secar a Jackson Martínez y Lewandowski. Jugó 11 de los 12 partidos de la Champions. Sólo se perdió el dramático duelo de Dortmund por acumulación de amarillas...