Sólo seis supervivientes del último revolcón al Barça

El Barcelona vuelve a visitar La Rosaleda este sábado. La última vez que lo hizo fue el 8 de abril del año pasado, y en el estadio blanquiazul perdió media Liga porque un huracán llamado Málaga pasó por encima suyo y venció 2-0 gracias a los goles de Sandro y Jony, dos jugadores que ya no están en la disciplina malaguista (el asturiano está cedido en el Sporting).

Y no son los únicos, pues echando la vista atrás cae uno en la cuenta de que apenas sobreviven seis jugadores de los que formaron el once inicial aquella mágica noche en Martiricos y sólo cuatro de ellos podrán jugar el sábado. En la portería estuvo Kameni, que este verano se marchó al Fenerbahce para hacer hueco a Roberto. El lateral derecho lo ocupó Rosales, que se mantiene, al igual que Luis Hernández. Junto al madrileño en en el centro de la defensa estuvo su paisano Diego Llorente, que terminó su cesión y se fue a la Real Sociedad, y el lateral izquierdo lo ocupó Ricca, que también sigue. 
El centro del campo será totalmente nuevo, pues en el partido del curso pasado estuvo formado por Camacho, Pablo Fornals, Recio y Juankar, que actuó de extremo. Los dos primeros abandonaron el Málaga en verano rumbo al Wolfsburgo y al Villarreal, mientras que el paleño tiene muy difícil llegar a tiempo al partido del sábado por ese esguince de rodilla del que todavía se está recuperando. Tampoco estará Juankar, de baja federativa por su grave lesión de rodilla. 
Arriba jugaron Sandro y Juanpi. El venezolano sigue en el equipo, pero ha perdido muchísimo protagonismo y este curso está jugando muy poco. De hecho, con José González nunca ha sido titular y sólo ha jugado 24 minutos en ocho partidos, por lo que sería una sorpresa que actuara de inicio el sábado. Por su parte, Sandro se fue al Everton previo pago de su cláusula y ahora está en el Sevilla a préstamo. 
En definitiva, el Málaga ha cambiado mucho en estos once meses que han pasado desde aquel meritorio 2-0 con Míchel al mando. Aquel equipo llegaba con la moral alta tras ganar la 'final' de Gijón ante el Sporting y terminó de abrochar la permanencia con ese revolcón al Barça. Pero el Málaga de ahora llega en el peor momento en muchos años, hundido y con pie y medio en Segunda...