Del taxista precavido de Hicham al benjamín acompañado por su padre
La mañana de este miércoles en La Rosaleda dio para mucho. Pellicer, dando ejemplo, abrió la veda de los reencuentros entre compañeros y miembros del club. Las medidas sanitarias obligadas por el coronavirus impidieron la fogosidad, pero las caras desprendían ilusión entre los jugadores. Ya huelen el césped, aunque primero deberán recibir el visto bueno tras conocer los resultados de las pruebas de COVID-19. Detalles, varios, como ver a Juanpi (el primer futbolista que habló en el regreso al trabajo) hacer cola esperando entrar en La Rosaleda o a Keidi bromear con todo aquel que se encontró. Aunque dos de las imágenes más llamativas las pusieron dos canteranos: Hicham y Dani Strindholm (ver vídeo superior).
El extremo marroquí, que renovó su contrato hasta 2022 a mediados de marzo cuando los entrenamientos ya estaban suspendidos, y que era uno de los jugadores lesionados cuando el fútbol se vio obligado a parar, llegó a La Rosaleda en taxi. Si bien Manolo Gaspar lo hizo en su Harley, al canterano le tocó tirar del servicio público para acudir a pasar los test. También fue digno de destacar que el taxista bajara de su vehículo para, al igual que hicieron los jugadores, lavarse las manos con el gel hidroalcohólico que el Málaga dispensó en la puerta de entrada.
Otro de los que tuvo que esperar su turno fuera de La Rosaleda fue el arquero Dani Strindholm, que hará las veces de cuarto portero dentro de la nómina de 30 jugadores elegidos por Pellicer y que es el más joven de todos ellos. Tanto que el sueco, internacional en categorías inferiores, aún no tiene el carnet de conducir y fue su padre el que le llevó hasta el estadio blanquiazul. Educado, Strindholm saludó con timidez a los medios que aguardaban, se sentó como copiloto nuevamente, y marchó hacia el parking de La Rosaleda para continuar con el proceso.
La curiosa manera de motivarse de Strindholm
Lo que no se pudo comprobar es si el cancerbero mantiene la curiosa forma de motivarse antes de los entrenamientos que tenía años atrás. Strindholm tiene como uno de sus ídolos a John Guidetti (actual jugador del Hannover 96 que pasó por las filas del Celta o el Alavés) y en una entrevista en Fotbollskanalen confesó su rutina cada vez que su padre lo llevaba a los entrenamientos. En su tiempo a Guidetti le hicieron una canción -puedes escucharla aquí- que conquistó a Strindholm. "Pongo la canción de Guidetti a gran volumen", admitió el benjamín de los 30 elegidos por Pellicer para lo que resta de temporada.