Martin Odegaard, el niño prodigio al que recomendó Cristiano y sus 'lazos' con la monarquía noruega

"Mi historia empieza en Drammen, donde pasé horas de entrenamiento para tratar de ser lo mejor jugador que pudiera...". Estas palabras pertenecen a Martin Odegaard, el futbolista de 20 años que este verano llegó a la Real Sociedad con el deseo de volver a disfrutar del fútbol en LaLiga española y, en un futuro, regresar al Real Madrid, club al que pertenece, pero eso sí, sin prisa, y creciendo en un club donde ha encontrado todo lo que necesita para ser "feliz".

El centrocampista noruego nació un 17 de diciembre de 1998, el mismo año que lo hicieron Éder Militão, Luca Zidane o Kylian Mbappé. Desde que era un niño Odegaard siempre tuvo claro su sueño: triunfar en el mundo del fútbol. No era el primero en probar fortuna en su familia con el balón en los pies. Su padre, Hans Erik, jugó para el Stromgodset, club en el que también militó Martin antes de fichar por el Real Madrid.

La familia de Martin Odegaard era propietaria de una famosa línea de tiendas de ropa tanto para hombre como para mujer, y el apellido de la familia además saltó a la fama más allá de lo deportivo, cuando se supo que el tío del futbolista había mantenido un noviazgo con la princesa noruega Martha Louise. Más allá de esta anécdota, el actual jugador txuri urdin siempre ha seguido una trayectoria en la que ha tratado de dejar en segundo plano su vida personal para centrarse en lo que es su pasión, la pelota.

Con el balón en los pies desde niño

Martin Odegaard amó el fútbol desde niño, y su mayor diversión era dar patadas al balón. Siendo un crío empezó a jugar en el equipo local de su ciudad, el Drammen Strong. Poco a poco iba cosechando diferentes reconocimientos, como un premio al mejor talento futbolístico de Noruega. Con apenas 12 años fichó por el Strømsgodset I. F., club en el que también jugó su padre, y con uno más ya debutó con el primer equipo aunque principalmente en las categorías inferiores. Para entonces el Bayern de Múnich y el Manchester United ya se habían fijado en él. Llegó a entrenar en Alemania, pero no logró quedarse.

Odegaard se estaba labrando día a día su apodo de 'niño prodigio', y más cuando con 15 años fue ya convocado con la absoluta; el jugador más joven en la historia del fútbol noruego en jugar con la selección. "Esto es increíble y un sueño hecho realidad. Estoy en shock", declaró entonces el joven nórdico quien es un ídolo en su tierra, donde le tienen incluso dedicada una canción.

El interés de los grandes clubes alcanzó también a Juventus, PSG, Ajax, Barcelona y Real Madrid. Y fueron precisamente los 'blancos' los que se hicieron con sus servicios. Fue en enero de 2015. Un mes antes, Martin Odegaard había cumplido 16 años. Según recogía un periódico noruego fue el propio Cristiano Ronaldo quien le aconsejó fichar por el Real Madrid: "Dentro de dos o tres años marcaré menos goles y tendrás que ayudarme", habría dicho el portugués según recogió Eurosport.

Pocas oportunidades en Madrid

El Real Madrid habría fichado al jugador de Drammen por unos dos millones de euros para seis temporadas. Su destino sería el Castilla dirigido por Zinedine Zidane, actual entrenador de la primera plantilla. Casualidades del destino, su debut tuvo lugar frente al filial del Athletic. Con tal solo 16 años y en el equipo B, Martin Odegaard cobraba 1,5 millones de euros por temporada.

Pese a las expectativas, el noruego no terminaba de ser regular en el Castilla y se vio frenada su progresión a las órdenes de Zidane. Con el filial disputó 62 partidos y anotó dos goles, mientras que con el primer equipo del Real Madrid solo participó en un partido oficial, por lo que el club madrileño le abrió las puertas a la liga holandesa.

Salió cedido al Heerenveen y anotó dos goles. Su siguiente destino, en la 2018-19 fue el Vitesse, y también a préstamo. Fue en este club donde logró alcanzar un gran nivel ya que jugó 39 partidos y logró 11 goles y 12 asistencias.

Odegaard elige a la Real

Pese a su buen año en el Vitesse, Martin Odegaard sabía que su futuro más cercano no pasaba por Madrid. Tenía dónde elegir ya que había varios equipos interesados en hacerse con sus servicios. A la 'pelea final' llegaron el Bayer Leverkusen y la Real Sociedad. El jugador visitó las instalaciones deportivas de ambos clubes, en el caso de las txuri urdin acompañado de Bjørn Kvarme, exjugador noruego, exjugador de la Real, y agente del futbolista. La decisión se hizo oficial el pasado 5 de julio, cuando la entidad gipuzkoana hacía oficial la incorporación del nórdico para las dos próximas temporadas en calidad de cedido, aunque con fórmula de '1+1' ya que por asuntos burocráticos en España solo se permiten las cesiones año a año.

La pretemporada de Martin Odegaard, admirador de Messi, amante de los animales y con debilidad por los smoothies, ya dejó atisbo de lo que se podía esperar del jugador. Un futbolista diferente, elegante, mágico. Y con el comienzo de LaLiga Santander 2019-20 ya lo ha refrendado enamorando a cualquier aficionado al fútbol de Donostia, Madrid y de cualquier lugar donde guste este deporte. En la jornada 2, ante el Mallorca en Son Moix (0-1), lograba su primer gol no solo con la elástica txuri urdin, sino también en la competición regular nacional.

Y de no haber marcado nunca en LaLiga, a hacerlo dos veces, la última, la del pasado sábado frente al Atlético de Madrid en el debut del Reale Arena ante la afición realista, donde se 'doctoró' con apenas cuatro jornadas disputadas. Martin Odegaard es ahora el 'deseado', incluso la propia afición del Real Madrid sueña con poder verlo ya vestido de blanco. Pero tendrán que esperar. Y es que si algo tiene claro el noruego es que no quiere precipitarse como reconoció tras el encuentro de la pasada jornada:

"Lo estoy pasando muy bien en la Real y disfruto del tiempo aquí. Todo está bien, así que estoy muy feliz. Estoy cómodo y me siento como en casa. Eso hace todo más fácil", así que, aunque en un futuro desea triunfar en la capital, también es rotundo al señalar que "al término de la temporada pasada sentí que no sería bueno para mí volver aún a Madrid. Para los jugadores jóvenes, y para mí en este momento, es muy importante tener minutos. En Madrid creo que es muy difícil de conseguir. Hay muchos buenos jugadores allí y la competencia es muy grande. Era obvio para mí que era mejor pedir una nueva cesión, algo que creo que el club también aceptó".

De momento es la Real Sociedad y su afición quienes lo disfrutarán los dos próximos años. Al igual que Odegaard podrá disfrutar de este club, de sus seguidores, del nuevo estadio, de la ciudad y de la gastronomía gipuzkoana. El reino de 'Odín-Gaard', de momento, pinta en blanco y azul.